Cómo vestir si eres una mamá moderna

Te damos algunos consejos de estilo para que te mantengas a la vanguardia en la hora de vestir

Andrea Mendoza

El estilo no está peleado con la maternidad. Sabemos que cuando una mujer se convierte en madre, toda su atención se dirige hacia sus hijos y, en ocasiones, se olvida de preocuparse de sí misma; esto incluye su imagen, pues todo lo que se proyecte al exterior es un reflejo de lo que hay al interior.

Para no perder la jovialidad y ser una mamá moderna, tenemos unos ‘tips’ para mantenerte a la moda. ¡Toma nota! Acude a los tonos pastel Esta gama de colores dan un to – que más sofisticado, elegante y femenino a tu atuendo. Es una apuesta segura que puedes implementar en los ‘outfits’ de día y, también, de noche.

• Los pantalones son tus aliados

Tener en tu armario pantalones formales te sacará de cualquier apuro, siempre y cuando elijas los que se adapten mejor a la forma de tu cuerpo; ya que hay de muchos cortes y tipos, para vestir en toda ocasión.

Arriésgate con los estampados Los estampados hacen que tu conjunto se vea más vivo y para esta temporada primaveral queremos que pruebes el estilo tropical, que es una opción divertida y colorida.

Además, ayudan a disimular los kilos de más que quedaron después del embarazo.

• ‘Blazers’ para siempre

El ‘blazer’ es una prenda que no pasa de moda con el transcurso de los años, así que puedes confiar en él para tus ‘outfits’ casuales y combinarlo con unos ‘jeans’ y botines; para ir a la oficina o para una apariencia más formal, que agregará ese guiño de elegancia. ¡No puede faltar en tu clóset!

• Dale un lugar a los ‘flats’

Aparte de ser un calzado cómodo, lo puedes usar en tus ‘looks’ de diario, porque son muy versátiles, van con todo y los encuentras en cualquier color.

No solo te verás moderna, sino como una mamá muy relajada. Como mamá, es mejor inclinarse por las tendencias que te brinden comodidad, sin perder tu chispa de juventud.

Es preferible no revelar demasiado con las prendas que uses, pero eso, tampoco, implica que tengas que ‘aseñorarte’ con un vestuario conservador y aburrido.