Conoce el significado del Día de la Candelaria

El Día de la Candelaria en México es una festividad que se dio como resultado de una mezcla entre costumbres prehispánicas y católicas

Adrián Ibarra

El Día de la Candelaria se fundamenta en la combinación de argumentos bíblicos con costumbres prehispánicas.

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Respecto al aspecto religioso, se pueden encontrar dos acontecimientos bíblicos: la presentación de Jesús en el templo de Jerusalén y la purificación de la Virgen después del parto, pues cada 2 de febrero es la fecha en la que se cumplieron los 40 días desde el nacimiento de Jesús y de acuerdo con la ley del Antiguo Testamento, terminaba el ritual que acompañaba al nacimiento de un niño.

En la tradición católica, este día es importante porque se trata de la presentación de Cristo ante los fieles y creyentes, siendo él la representación de la luz que llega para iluminar el mundo.

Por su parte, el aspecto prehispánico en esta festividad se mantiene con la conmemoración a Tláloc, Chalchiuhtlicue y Quetzalcóatl en esta fecha, siendo el primer día del año azteca y el inicio de la temporada de cosechas.

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Esta festividad se celebra cada 2 de febrero, fecha en la que también se celebra la purificación de las semillas para la siembra; este día coincide en el calendario azteca con la bendición del maíz en el inicio de la temporada de cosecha , en la que los habitantes de muchos pueblos acostumbraban llevar las mazorcas a la iglesia para bendecir los granos y la cosecha futura para su siembra en el nuevo ciclo.

El consumo del tamal (vocablo náhuatl que significa ‘envuelto’) aporta la esencia de diversas culturas indígenas que ha permanecido en la gastronomía mexicana.

El 2 de febrero, día en que los mexicanos comen tamales

En México, el Día de la Candelaria es la tercera festividad religiosa más importante del país, después de la Navidad y la Pascua, con lo que se marca el fin del maratón extendido de las festividades decembrinas.

Actualmente, el atole y los tamales son los grandes protagonistas de esta celebración en México, alimentos que son elaborados con maíz, elemento de raíces prehispánicas que se mantiene vigente.

Esta fecha simboliza la purificación de la Virgen, cumpliéndose 40 días después del nacimiento del niño Jesús, cuya figura es llevada al templo junto con velas o candelas para ser bendecidas, con la creencia de que pueden ayudar en momentos difíciles.

En México se acostumbra que a quienes les apareció un muñeco del niño Jesús al momento de partir la rosca de reyes el 6 de enero, son los encargados de comprar los tamales y el atole para el resto de los presentes el día 2 de febrero.

¿Cómo preparar tamales?

La creación de tamales se compone de dos procesos, mismos que se refieren a la preparación de los dos elementos que componen este platillo mexicano: la masa y el guiso.

La masa

Una masa bien preparada es la base para que los tamales sean verdaderamente buenos, por lo que es el paso más importante de la preparación de esta comida.

Ingredientes:

• 4 tazas de harina de maíz.
• 5 tazas de manteca de cerdo.
• 1 cucharada de sal.
• 5 cucharadas de polvo para hornear.
• 5 tazas de agua caliente.

Preparación:

1. Mezcla bien la harina, manteca, sal y polvo para hornear en un tazón grande.
2. Vierte cuatro de las cinco tazas de agua caliente.
3. Revuelve el resto del agua caliente hasta formar una masa firme.
4. La consistencia debe ser suave, no sólida, pero tampoco ‘chiclosa’.

Tamales verdes

Los sabores de los tamales son diversos; en esta ocasión elegimos los tamales de salsa verde para indicar su preparación.

Ingredientes:

• 1 kilogramo de carne de pollo o de puerco desmenuzada.
• 1 kilogramo tomate verde.
• 1 cebolla.
• 4 dientes ajo.
• 250 gramos de chiles serranos.
• Hojas secas de maíz.

Preparación:

• Poner a remojar las hojas hasta que estén suaves, proceso que puede tomar 15 minutos aproximadamente. Una vez suaves, ponerlas a escurrir separadas.
• Prepara tu salsa en crudo con los tomates, chiles, ajos y cebolla; una vez molidos o licuados los ingredientes, fríe la salsa con un poco de aceite o manteca.
• Añade la carne que hayas elegido y hervido, previamente, y sazona a tu gusto.
• Pon dos o tres cucharadas de la masa, previamente preparada, en la hoja y expande la masa a lo largo de la hoja.
• Agrega el guisado en el centro y sobre la superficie de la masa y luego envuelve.
• Cuida que tus porciones, tanto de masa como de guiso no se salgan de las hojas.
• Dobla las puntas de manera que el empaque quede perfectamente sellado.
• Agrega tus tamales de forma vertical en una vaporera con agua suficiente.
• Pon a cocer a fuego alto por un tiempo aproximado de una hora y media, contando el tiempo a partir de que el agua hierve.
• Revisa los tamales periódicamente hasta que estén perfectamente cocidos.

AMIP.