Urgen acciones contra el cambio climático en el Estado

Gonzalo Flores

Para el Observatorio Ciudadano de Movilidad de Querétaro, el tiempo de ignorar el calentamiento global ya se agotó y es necesario atender las afectaciones que generará en un mediano y largo plazo en la entidad, tras las alertas emitidas en el informe del Panel Intergubernamental del Cambio Climático hace unos días.

Sergio Olvera León, vocero del organismo, destacó que este informe “confirma muchos de los peores pronósticos establecidos con anterioridad. De no hacer algo de inmediato, para el año 2100 la parte oriental de México, dónde está Querétaro, será un desierto inhabitable, sin agua corriente y (con) sequía permanente”, advirtió.

Consideró que la alerta ya está en rojo, y es necesario actuar de forma inmediata, por lo que también hizo énfasis en una de las acciones pertinentes y al alcance de los ciudadanos, que es la reducción del uso del automóvil particular.

“Cambiarlo por uno eléctrico no es la solución, ya que la congestión vehicular, las muertes, las discapacidades temporales y permanentes que ocasiona, así como el impacto económico que ello provoca seguirán, sin olvidar que la generación de electricidad sigue empleando combustibles fósiles, sea carbón o petróleo”, añadió.

Otro punto importante que mencionó para la entidad “es dejar de construir más vialidades, y por el contrario, tener cada día menos espacio de desplazamiento y guarda de vehículos; será una de las medidas que esperamos del nuevo Gobierno. El asfalto retiene el calor y no permite que el agua se filtre al subsuelo”, mencionó.

Por otro lado, se requiere más vegetación, espacios arbolados, así como usos distintos del espacio público, acciones que, considera Sergio Olvera, deben aplicarse de inmediato.

“Esperamos que la nueva Administración estatal sea sensible a este tema, y en los hechos impulse el desplazamiento de personas y mercancías, no el de autos. Que la apuesta sea una movilidad donde se privilegie el transporte colectivo muy por encima del particular”, añadió.

De acuerdo con estudios científicos, destacó que “una meta factible y posible” es reducir anualmente un 7 por ciento el uso de los automóviles en las ciudades, para cumplir al menos un 70 por ciento al final de la década.