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Práctica debe superar el discurso en perspectiva de género

El 75 por ciento de personas que utilizan el transporte público en la ciudad, son mujeres. / Foto: Victor Xochipa
El 75 por ciento de personas que utilizan el transporte público en la ciudad, son mujeres. / Foto: Victor Xochipa

Especialistas señalan que el proyecto de la avenida 5 de Febrero sigue privilegiando a los automóviles por encima de una movilidad más incluyente y con perspectiva de género

Gonzalo Flores

En el proyecto Paseo 5 de Febrero, la vialidad sigue siendo lo más importante y se dejan de lado otros elementos como una pequeña ciclovía o una banqueta que no se sabe cuánto va a medir.

Aseguró la maestra en Urbanismo, Olga Leticia Aguilar Sánchez, durante el panel ‘Movilidad, perspectiva de género e inclusión‘ que se llevó a cabo dentro del primer día de actividades del Foro Intergremial Querétaro Planeado, el cual busca que este discurso y perspectivas se incluyan en la práctica.

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“Si vemos los renders, la vialidad sigue siendo la más importante. Seguimos viendo que se pone al auto en primer lugar y solo el discurso es diferente, al menos creo que se debe celebrar ese discurso pero en la práctica no se está alcanzando y no resulta suficiente para poder afirmar que estamos transformando algo de raíz, profundamente”, comentó.

La especialista señaló que en foros como este, activistas ciudadanos deben seguir defendiendo la necesidad de una movilidad más incluyente y con perspectiva de género “hasta que la práctica alcance al discurso”.

Indicó que la excesiva atención que se le da al auto privado en la construcción de la ciudad es el componente clave, uno de los más importantes para lograr una verdadera transformación social.

Mencionó que el autor Francesco Tonucci señala que la ciudad está construida para el adulto hombre trabajador que viaja en coche donde se busca que esta persona viaje de manera rápida y sin detenerse porque el tiempo es dinero.

“Entonces desestimamos a cualquier otro usuario de la vía pública, llámese transporte público, ciclista o peatón, entre ellos mujeres, niños, adolescentes, personas de la tercera edad y demás minorías quienes tienden a viajar en otros medios de transporte que no es el automóvil”, indicó.

Agregó que tan solo el 75 por ciento de personas que utilizan el transporte público en la ciudad, son mujeres.

Perspectiva de género como herramienta de transformación

Por su parte, la doctora Stefanía Biondi, especialista en género y participación ciudadana, destacó que desde el siglo XX, la perspectiva de género se considera en diversas disciplinas actualmente en el siglo XXI, dicha perspectiva no es solo una herramienta de estudio “sino que tiene que ser una herramienta de transformación en lo que atañe al hábitat, a la ciudad, a la movilidad”.

La maestra en Innovación Lorena Suárez Álvarez destacó que en la Ley de Movilidad del Transporte solo se menciona la palabra ‘mujer’ una sola vez en un total de 92 hojas que la componen.

“Para mencionar que es obligación de usuarios del transporte ceder el asiento a las mujeres embarazadas donde es otro ejemplo de invisibilización y hay que hacer algo al respecto”.

Sin embargo, resaltó que en la recién aprobada Ley General de Movilidad y Seguridad Vial ya se considera el concepto de Movilidad del Cuidado y ya se estipulan acciones que se deben tomar en cuenta.

Explicó que este concepto se dirige a todos los trayectos que realizan las mujeres para los cuidados de los hijos y que no son tomados en cuenta como productivos.

“Hay tres acciones fundamentales para lograr que la movilidad sea un activo y se vuelva una fuerza transformadora para retar las relaciones de poder.”

  • Primero es visibilizar las labores de cuidado, su importancia y transcendencia y como éstas se realizan en el espacio público.
  • Segundo lugar, hay que priorizar su estudio
  • Tercero, actuar en consecuencia que es ampliar los criterios para las prácticas de movilidad que incluyan la movilidad del cuidado

“Queda mucho camino por recorrer para obras con perspectiva de género”

El arquitecto Raúl Lorea Salinas expuso a su vez que es importante la visión de las mujeres pues es el factor de cambio social.

Comentó que aunque se pueden celebrar algunos pequeños avances en la integración de las voces femeninas para la transformación del espacio público, todavía queda camino qué recorrer para integrar la perspectiva de género en la práctica por completo.

“Actualmente podemos decir que la propuesta (de intervención de la avenida 5 de Febrero) en el discurso suena bien, ya se habla de perspectiva de género, se habla de accesibilidad universal y de seguridad y accesibilidad para el entorno de las infancias, son tres puntos que antes las ciudades no tenían, son tres puntos que hoy están en el discurso político y que ahora nosotros como ciudadanas y ciudadanos nos toca estar vigilando que se les dé cumplimiento”, aseguró.

Ejemplificó que el proyecto de la avenida 5 de Febrero busca solucionar un problema de movilidad urbana.

Pero destacó que la movilidad para mujeres y hombres, comienza desde que cierran la puerta de su casa y no se toma en cuenta el entorno hostil que las mujeres enfrentan desde ese momento.

“Como hombres tenemos un instinto diferente para reaccionar ante un entorno hostil, pero nunca nos hemos puesto en los zapatos de ellas. Atendiendo esa necesidad y comprendiendo que se requiere un mejor entorno público, vamos a poder involucrar a la otra mitad de la población que no se siente representada en estos proyectos, que no se ha sentido atendida con estos proyectos y que hoy por hoy percibe un espacio público hostil. El cambio está en todos”, aseguró.

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