El 61% del empleo en el estado es generado por mipymes

Juan Carlos Machorro

El Directorio Estadístico Nacional de Unidades Económicas señala que, en Querétaro, hay cerca de 85 mil 804 unidades económicas, de las cuales, 98.2 por ciento son mipymes.

Estas unidades económicas en la entidad equivalen al 1.4 por ciento de las existentes en el país y las mipymes estatales generan el 61 por ciento del empleo total del estado, de acuerdo con esta estadística.

En 2022, el Presupuesto de Egreso Federal (PEF) ratificó la desaparición de los apoyos oficiales a las micro, pequeñas y medianas empresas (mipymes), a pesar de que todavía estaban considerados en los Criterios Generales de Política Económica de abril pasado, donde se indicaba que pasarían a la Secretaría del Bienestar.

El programa de Crédito a la Palabra prestaba hasta 50 mil pesos y en 2020 tenía un presupuesto de 2 mil 451 millones de pesos. Para 2021, se aprobaron mil 500 millones y en 2022 no existirá; mientras que el programa de apoyo financiero a microempresas familiares, que prestaba 25 mil pesos, en 2020 tuvo un presupuesto de 36 mil 754 millones de pesos, en 2021 de mil 600 millones y en 2022 también desapareció.

Al respecto, César Miguel Valenzuela, profesor investigador de la Facultad de Ciencia Económica de la Universidad de Sinaloa, compartió que, desde el Presupuesto Federal, del 2021 se dejó de apoyar a las micro y pequeñas empresas (mipymes) que versaban en apoyos de hasta 25 mil pesos con pagos de bajos grados de intereses.

En Querétaro, la Secretaría de Desarrollo Sustentable (Sedesu) informó que el Gobierno estatal cuenta con una política de apoyos para las mipymes en varias subcategorías: locatarios de mercados (para infraestructura y equipamiento, se brinda un apoyo de 10 mil pesos), mercados (con motivo de la emergencia por el SARVS-CoV2, 5 mil pesos), tianguis (apoyo para infraestructura, 7 mil pesos) y tianguis (con motivo de la emergencia por el virus, 3 mil 500 pesos).

También se lanzó un programa para fomentar el uso de energías renovables en tortillerías, carnicerías y misceláneas. Para esta iniciativa, el Gobierno estatal apoya con 50 por ciento del costo y el resto deberá ser aportado por el beneficiario.

El catedrático agregó que el 2022 será un año de grandes retos, pues se tiene una alta inflación, una estacionalidad económica, dos años de crisis sanitaria por la pandemia y solo un 50 por ciento de la población vacunada, sumado a que la variante ómicron puede acarrear un lento crecimiento socioeconómico, la depreciación del peso, el tipo de cambio peso-dólar, gasolinazos e incremento de los impuestos.