Aniversario del nacimiento de una nación
Francisco Pérez El 27 de septiembre de 1821 se estableció el Imperio Mexicano. Ese día se firmó el Acta de Independencia con la que se reconoció el nacimiento de la nueva nación. Atrás quedaron 11 años de guerra, en la que participaron miles de mexicanos y queretanos. El pueblo de México relaciona su Independencia con … Leer más
Francisco Pérez
El 27 de septiembre de 1821 se estableció el Imperio Mexicano. Ese día se firmó el Acta de Independencia con la que se reconoció el nacimiento de la nueva nación. Atrás quedaron 11 años de guerra, en la que participaron miles de mexicanos y queretanos.
El pueblo de México relaciona su Independencia con el grito del cura Miguel Hidalgo y Costilla, la noche del 15 de septiembre de 1810. En esos años, Querétaro fue protagonista en la historia, se recuerdan las reuniones literarias en las que se planeó el levantamiento insurgente. Ese momento histórico marcó el inicio de la gesta libertadora; sin embargo, la culminación llegó hasta 11 años después.
Tras la muerte de los iniciadores de la revuelta, Hidalgo, Ignacio Allende, Juan Aldama, en 1811 y posteriormente la de Morelos en 1815, la lucha por la Independencia en la Nueva España se convirtió en una guerra de guerrillas. En estados del sur, como Guerrero y Oaxaca, hubo alzamientos en diferentes etapas de la guerra.
Guadalupe Victoria y Vicente Guerrero fueron dos de los principales líderes de estos movimientos que mantuvieron viva la lucha por la Independencia. El general Agustín de Iturbide es otro de los personajes principales de la formación de México como nación. En el inicio del conflicto, participó activamente como parte de las fuerzas realistas, pero con el transcurso de los años terminó siendo determinante en favor de la causa libertaria.
El 10 de febrero de 1821 ocurrió el episodio denominado ‘abrazo de Acatempan’, que formalizó la unión de los Ejércitos de Agustín de Iturbide y Vicente Guerrero. Esto marcó la unión entre la fuerza virreinal y el Ejército insurgente, formándose así el Ejército Trigarante, el cual serviría para derrocar las últimas fuerzas españolas del territorio nacional.
30 contra 400
Querétaro vivió uno de los últimos episodios bélicos de la guerra de Independencia. Ocurrió el 7 de junio de 1821, en las faldas del cerro del Cimatario. El general Agustín de Iturbide, con apenas 30 hombres, enfrentó a 400 realistas, dirigidos por el brigadier Luaces.
Los leales a la Corona, apostados en la alameda de la ciudad, vislumbraron a los insurgentes que avanzaban por el rumbo de Arroyo Hondo con la intención de continuar su paso a la Cuesta China. El enfrentamiento era inminente.
El triunfo de Agustín de Iturbide y sus 30 hombres permitió que avanzaran hacia San Juan del Río, y posteriormente a la capital de la Nueva España, que estaba próxima a ser la capital del Imperio Mexicano.
El estado de Querétaro cerró de esta manera una activa participación en la guerra del Independencia, que inició con el aviso de Josefa Ortiz de Domínguez a Miguel Hidalgo sobre el descubrimiento de la conspiración, y concluyó con la victoria del Ejército Trigarante al último reducto realista que había en Querétaro.
El 27 de septiembre de 1821, el Ejército de las ‘tres garantías’ entró en la Ciudad de México para firmar el Acta de Independencia, con lo que terminaron 300 años de dominio español en este territorio.
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