IQM abrirá nuevo refugio con escuela para niños
El Instituto Queretano de las Mujeres tendrá nuevo centro que entrará en operaciones el inmueble que contará con un modelo de apoyo para iniciar de nuevo, pero en un ambiente sano Khalid Osorio El Instituto Queretano de las Mujeres (IQM) contará con un nuevo centro para mujeres que sufrieron violencia con la finalidad de brindar … Leer más
El Instituto Queretano de las Mujeres tendrá nuevo centro que entrará en operaciones el inmueble que contará con un modelo de apoyo para iniciar de nuevo, pero en un ambiente sano
Khalid Osorio
El Instituto Queretano de las Mujeres (IQM) contará con un nuevo centro para mujeres que sufrieron violencia con la finalidad de brindar herramientas para continuar con una vida distinta.
Comenzará operaciones en mayo.
En entrevista con AM de Querétaro, Valeria Guerrero Ángeles, comentó que el refugio contará con una escuela para que los niños que llegan acompañados de sus madres.
El objetivo es apoyarlas para que sus hijos no tengan un retraso en su formación educativa.
“Habrá mujeres que pueden llegar con un niño o dos, la idea es que tengan un espacio individual, con todas las medidas de seguridad al interior y una escuela multigrado y el área de maternal para los más pequeños.
“Hay un área de preescolar, primaria y secundara, por lo que los niños y niñas no pierden el ciclo escolar”, dijo Valeria.
PERFECCIONAN EL MODELO
La directora del IQM dijo que realizaron un recorrido por distintos refugios en distintos estados de la República para adoptar buenas prácticas y perfeccionar el modelo de operación.
Añadió que existe una red nacional e internacional de refugios en donde los estados funcionan como espacio de seguridad de otras entidades.
“Este espacio también puede recibir a mujeres de otros estados en donde resultara que quizá en esa entidad no existieran las condiciones de seguridad y en Querétaro sí”, dijo la directora del Instituto.
El ingreso al refugio se realiza bajo un criterio de valoración, en donde se privilegia que las mujeres se desarrollen en ambientes sanos, los cuales muchas veces se extienden más allá de sus hogares y se contempla el ambiente que las rodea.
“No sólo hay que revisar o valorar la peligrosidad del agresor, sino muchas veces el ambiente comunitario no es el óptimo.
“En las zonas rurales o urbanas las mismas comunidades protegen a los agresores, entonces no resulta seguro el que una mujer se halle en un espacio aun cuando se haya puesto ante las autoridades la disposición del agresor”, explicó Guerrero Ángeles.
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