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Traerán hospitales privados vacuna contra COVID-19 a Querétaro

Para el epidemiólogo Miguel Hernández, la vacuna es rentable para la IP por el manejo que necesita. / Foto: Fernando Camacho
Para el epidemiólogo Miguel Hernández, la vacuna es rentable para la IP por el manejo que necesita. / Foto: Fernando Camacho

En Querétaro, la vacuna contra COVID-19 tendrá un costo de entre 80 y 100 dólares. La iniciativa privada gestiona con la UNAM el uso de ultracongeladores; a la fecha hay 10 en el Estado   Khalid Osorio La iniciativa privada en el estado de Querétaro ya realiza trámites para solicitar a la Comisión Federal para … Leer más

En Querétaro, la vacuna contra COVID-19 tendrá un costo de entre 80 y 100 dólares. La iniciativa privada gestiona con la UNAM el uso de ultracongeladores; a la fecha hay 10 en el Estado

 

Khalid Osorio

La iniciativa privada en el estado de Querétaro ya realiza trámites para solicitar a la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) la autorización para la importación y venta de vacunas contra el COVID-19.

Sandra Hernández, directora médica del Hospital San José Moscati, reveló para AM de Querétaro que como grupo de Hospitales San José ya se encuentran en conversaciones con sus socios comerciales en el extranjero para importar el tratamiento.

El precio comercial estimado para la vacuna de Pfizer -hasta el día de hoy la única aprobada en México-, oscilaría entre los 80 y 100 dólares, precisó la experta. Este precio podría disminuir en caso de crearse una cadena más grande de congelación, puntualizó la doctora Hernández.

“El problema es el manejo, pero tenemos los hospitales llenos de personal capacitado para la aplicación, y obviamente para una respuesta o alergia que surgiera estamos preparados para dar una respuesta rápida”, expresó.

 

MÁS EN LA DISCUSIÓN

Otros hospitales privados que conforman el clúster médico ya trataron el tema de la importación de vacunas para su comercialización en la entidad; incluso, se plantea la generación de convenios con la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) para el uso de ultracongeladores que resguarden las dosis.

 

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EL ACCESO Y LA LLEGADA

La población que podría acceder a la vacuna en una primera instancia es el personal médico, posteriormente se pondría al alcance de los pacientes.

“Los primeros que accederían sería la población queretana, que son nuestros mayores inversores y promotores, y después de eso se podría ofertar a algunos más”, explicó Sandra Hernández.

La aprobación por parte de Cofepris puede demorar solo días. Se espera que en enero se pueda dar la aprobación y en ese mismo mes se cuente con la vacuna en el sector privado.

“El proveedor tiene ya una bolsa para otras situaciones y de unas cancelaciones que tuvieron; ellos están abiertos mientras se dé un precio asequible a todos y se asegure la distribución”, dijo la doctora Hernández.

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Por su parte, el doctor Benito Escutia Castellanos, integrante del comité COVID-19 del Hospital Ángeles de Querétaro, no compartió una fecha específica para que la vacuna esté disponible a través de hospitales privados debido al convenio de las compañías farmacéuticas con la Organización Mundial de la Salud (OMS) que va encaminado en surtir las dosis a los Gobiernos.

“Desconozco cuándo se pudiera dar. Es evidente que tarde o temprano se tendrá acceso a través de la iniciativa privada, pero hasta donde tenemos conocimiento, las compañías están obligadas principalmente a surtir a los Gobiernos de cumplimiento con la misma OMS”, comentó Benito Escutia.

 

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LA REVACUNACIÓN

Si el tratamiento se tiene en el sector privado cuando la Federación haya cumplido una parte importante de la cobertura, éste seguirá siendo necesario debido a la revacunación.

“Se sabe que la vacuna de de Pfizer son dos dosis, pero después no sabemos cuánto dure la revacunación, si serán cinco años o 10 años, o será como la de la influenza, una cada año. Esto implica un verdadero problema, porque no estamos hablando de vacunar a 130 millones de mexicanos, sino cuántas veces”, expresó Benito Escutia, integrante del comité COVID-19 del Hospital Ángeles de Querétaro.

Uno de los principales retos, dijo, es la logística para cumplir con las metas de vacunación, situación que, añadió, apremiaría la invitación a la iniciativa privada para sumar esfuerzos en la aplicación de dosis a la población abierta.

 

 

‘VACUNACIÓN, RENTABLE PARA LA IP’

Para el epidemiólogo Miguel Hernández, la venta de vacunas en el sector privado se puede dar hasta el segundo semestre del 2021 debido a los compromisos gubernamentales adquiridos por los fabricantes.

“Este es un evento mundial, y todos quieren la vacuna. Una de las mejores oportunidades que tenemos para controlar una pandemia, o cualquier enfermedad, es la vacunación”, señaló.

Explicó que a pesar del tiempo estimado para que la iniciativa privada tenga el tratamiento, éste  seguiría siendo rentable por el manejo que requiere. Agregó que la vacuna se agota en un fin de semana y no todas las personas podrán llegar a la aplicación.

“Pueden llegar 15 mil dosis, que se agotarán en dos fines de semanas, y la persona que no pudo ir al puesto de vacunación en ese momento, la va a tener que buscar afuera; es negocio todavía”, explicó el epidemiólogo local.

 

‘TODOS NECESITAMOS LA VACUNA’

Enrique Negrete, presidente del clúster médico en Querétaro, se pronunció a favor de que la vacuna se distribuya de manera gratuita en un principio.

“Todos necesitamos la vacuna. En un principio creo que debiera repartirse gratuitamente. No tengo claramente la información de cuántas vacunas se puedan disponer, y si eso permita tener una cobertura absoluta en un país tan grande como el nuestro”, expresó.

Asimismo, se dijo a favor de la estrategia de vacunación que implementó el Gobierno federal al priorizar al personal de la salud que mantiene contacto directo con los pacientes que tienen la enfermedad, y posteriormente a las personas que por su edad representan una población de riesgo.

“Si mantenemos al personal que los atiende con buena salud, garantizamos que se pueda seguir brindando atención y servicio, y posteriormente los grupos de edad más vulnerables; estoy de acuerdo con eso”, declaró el presidente del clúster médico local

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