Capital prepara construcción de dique rompepicos

Se prevé una inversión de 11.4 mdp y se espera la autorización de Semarnat y Conagua para comenzar la construcción; se calcula una vida útil de 50 años

Gonzalo Flores

La administración municipal capitalina prepara la construcción de un dique de regulación pluvial hacia aguas abajo del bordo El Refugio, en la delegación Epigmenio González Torres con una inversión de 11 millones 400 mil pesos.

La manifestación de impacto ambiental del proyecto hidráulico fue ingresada ante la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) para su autorización.

El proyecto consiste en la construcción de un dique rompepicos o de regulación pluvial, para contener las avenidas máximas del arroyo Pedro Mendoza y evitar el desbordamiento e inundaciones del área urbana situada aguas abajo.

El polígono de construcción del dique rompepicos comprende una superficie de
975.15 metros cuadrados, delimitados por un perímetro de 243.65 metros. Adicionalmente se contempla la construcción de una brecha de 4 metros de ancho y 180 metros de longitud que comprende una superficie de 695.36 metros cuadrados para el acceso, considera una obra asociada al proyecto.

El objetivo del proyecto es la construcción de un sistema de control y disposición de agua pluvial con pretendida ubicación hacia aguas abajo del bordo El Refugio, sobre el arroyo Pedro Mendoza.

Esta obra beneficiará de manera directa las condiciones de vida de la población asentada aguas abajo del sitio propuesto; sobre todo en la temporada de máxima precipitación en donde la capacidad de la infraestructura pluvial se ha visto rebasada, desbordándose y poniendo en riesgo su integridad física y afectando el patrimonio de las familias y ocasionando daños a la infraestructura urbana.

La regulación del agua pluvial se pretende mediante la construcción del dique rompepicos: estructurado de concreto armado en la cimentación y cortina, el enrocado del tanque amortiguador contando con un vertedor de concreto premezclado. Cuando alcance su máxima capacidad permitirá el desalojo total del agua en un tiempo estimado de 2 a 3 horas aproximadamente, únicamente en los eventos torrenciales que provoquen picos en las avenidas del escurrimiento.

Se estima un periodo de vida útil superior a los 50 años.

El periodo de vigencia que se solicita para la manifestación de impacto ambiental es de 2 años, ya que se estima que la ejecución de la obra podrá realizarse en 12 meses o menos; sin embargo, se considera un tiempo mayor por la demora en la obtención de permisos y autorizaciones correspondientes de parte de la CONAGUA, previos al inicio de construcción.

La construcción propiamente se programa realizar en 9 meses, que comprenden el periodo de secas debido a que la obra se realizará al interior del escurrimiento, ajustándose a concluirse estrictamente a este periodo minimizando los impactos al suelo y agua principalmente.