Pandemia frena a circenses

El circo Atayde Hermanos cuenta con diversas filiales, René Ayala Galves y su familia, eran artistas de una de las tantas que tuvo que bajar las cortinas

Selene Ugalde

La pandemia por COVID-19 golpeó severamente el oficio en el que René nació, creció y creó a su familia. Ellos son una familia circense que trabaja en el Circo Atayde y llevan ya ocho meses sin poder laborar en lo que es su especialidad: realizar shows cada fin de semana para entretener a los ciudadanos de cada sede que visitan.

Cuando inició la alerta sanitaria ellos acababan de dar un espectáculo en Celaya y viajaron a Querétaro donde se establecerían por un tiempo para iniciar su trabajo en esta ciudad.
Sin embargo, la pandemia frenó totalmente sus intenciones.

El circo Atayde Hermanos cuenta con diversas filiales, René Ayala Galves y su familia, eran artistas de una de las tantas que tuvo que bajar las cortinas y destender las carpas porque las restricciones sanitarias indicaban que era imposible realizar espectáculos masivos y que la gente debía quedarse en casa.

Alrededor de 20 artistas que trabajaban en el circo se quedaron sin empleo tras el confinamiento, de los artistas que trabajaban ahí solamente permanece la familia circense de René Ayala Galves, sus hijos son payasitos musicales; igual que él y conforman el grupo los Tetocos.

Sus tres hijas son contorsionistas. Son una familia de 7 personas y hace 8 meses que no pueden realizar shows debido a la pandemia, cuentan con dos casas rodantes que están estacionadas en Corregidora. Tres de sus hijos son menores de edad, pero ya estaban acostumbrados a tomar sus clases por internet, a través de su celular. En este tiempo de pandemia, la familia ha tenido que dedicarse a distintas actividades que nada tienen que ver con su oficio.

Su hijo Ricardo, el mayor de los hombres, tiene 17 años y ahora se dedica a lavar coches; su hija, Arlini Lucero, tiene 23 años y arma las cajas de una pizzería para poder apoyar con los gastos familiares. René se dedica a vender ropa usada los fines de semana.

Don René es músico profesional, creció en el circo desde niño, su papá era de México y migró con el circo a Colombia. Allá nació René, creció dentro del circo y esa ha sido toda su vida, en el circo ha conocido toda Centroamérica y Venezuela. “Anteriormente, con el sueldo que nos pagaban en el circo realizábamos ensayos, pues se mantenía y todo, ensayábamos para progresar. Todavía ensayamos los domingos que no hay nada que hacer, está difícil pero ahí vamos”.

En este momento se encuentra arreglando su tambora para cuando los shows regresen.
René pide apoyo a toda la sociedad para los artistas circenses que se encuentran sin posibilidades de regresar a su oficio hasta que los contagios disminuyan.