Sensibilizar sobre la adopción en Querétaro es el reto

El proceso de adopción, más allá de los trámites burocráticos, pasa por sensibilizar a los solicitantes sobre el compromiso que adquieren

Magdiel Torres

Adoptar es un proceso que requiere sensibilización en torno al derecho a una familia que tienen niñas, niños y adolescentes. Sobre este sensible acontecimiento habló para este medio Paola Fernández Trejo, subprocuradora de protección de niñas, niños y adolescente del estado de Querétaro.

Buscar una familia a un niño en adopción no es fácil. Según lo señalado por la subprocuradora la problemática presenta dos aristas. Por un lado, la expectativa de los solicitantes. En su mayoría desean niños menores de siete años. Por otro, cuando hay niños con hermanos se busca no separar ese vínculo familiar.

“Por darte datos concretos el 95 por ciento de las solicitudes tienen una expectativa de edad de siete años o menos. El 4 por ciento amplía un poquito hasta los 9 y el resto es de más de nueve años. Solamente el 17 por ciento están dispuestos a adoptar hasta dos hermanos y solamente el dos por ciento está dispuesto a adoptar un niño con discapacidad”.

Si un infante tiene más de siete o nueve años. Si tiene hermanos y si tiene alguna discapacidad su probabilidad de ser adoptado se reduce. En el centro de asistencia social hay 163 infantes, 116 pertenecen a un grupo de hermanos y solo 25 tienen menos de nueve años.

EL PROCESO

En tanto al proceso para realizar una adopción hay dos etapas. La primera es un procedimiento en donde se realizan las valoraciones y la documentación para que ingrese a una lista de espera. Aquí empieza la segunda parte del proceso. “Entonces sí ya va a depender de la expectativa del niño de si están dispuestos a adoptar hermanos o no”.

Entrar a la lista de espera requiere de un tiempo aproximado de entre seis u ocho meses. Ha habido procesos rápidos, como el de un adolescente de 17 años que se inició su proceso en febrero y se entregó el acta de nacimiento recientemente. La intención, señaló la funcionaria, es trabajar para que los casos más difíciles sean ágiles.

El tiempo que un solicitante se encuentra en una lista de espera depende de sus expectativas. “Tenemos solicitantes que dicen yo quiero un niño de cero a un año y en tanto no se tenga una situación así con un pequeño que tenga su situación jurídica resuelta puede pasar más tiempo”, argumentó la funcionaria.

LA SITUACIÓN JURÍDICA

Antes de que un infante pueda acceder al proceso de adopción su situación jurídica debe estar resuelta. “Teniendo en cuenta el interés superior de la niñez lo primero que se hace es buscar la familia ampliada o extensa o trabajar con las familias de origen.  Ver cuál fue la situación que llevó a que alguna autoridad ponga a disposición de la procuraduría a algún niño”.

Si la situación es irreversible, si se puso en riesgo la vida del infante o su integridad física, entonces se hace el procedimiento para que se pierda la patria potestad para que quede a favor de la procuraduría. Lo anterior para que se llegue a una situación jurídica resuelta.

SENSIBILIZACION Y SEGUIMIENTO

A los probables padres adoptivos se les explica la situación de los infantes. Se busca que haya un proceso de sensibilización. En seguida se realizan convivencias en el centro de asistencia social en donde se encuentra el niño hasta que empieza a generar un vínculo. Cuando el vínculo se genera inician las convivencias domiciliares. El niño o adolescente se va a la casa de los solicitantes y es ahí cuando inicia el procedimiento judicial.

“Nosotros estamos siempre al pendiente. Una vez que se tiene la sentencia nosotros damos seguimiento por tres años para ver que todos los derechos del niño estén respetados, que el vínculo se haya generado de manera satisfactoria y que se encuentre bien, principalmente”, dijo la funcionaria.

El procedimiento puede ser largo y transitar lento para quienes tienen el deseo de ser padres adoptivos, pero la necesidad de los niños a una familia no es un privilegio, es un derecho, y los procedimientos van encaminados a que se cumpla esa máxima legal y humana.