Pandemia afectó operación de la Sociedad Civil Organizada
Encuesta del grupo Causas Ciudadanas destaca que el 16.2% están en riesgo de operar y el 44.2% dieron de baja a empleados remunerados. Participaron 48 organizaciones de Querétaro Gonzalo Flores El 70.8% de las asociaciones de la Sociedad Civil Organizada en el país han sufrido una disminución de sus fondos, ya sea de forma radical … Leer más
Encuesta del grupo Causas Ciudadanas destaca que el 16.2% están en riesgo de operar y el 44.2% dieron de baja a empleados remunerados. Participaron 48 organizaciones de Querétaro
Gonzalo Flores
El 70.8% de las asociaciones de la Sociedad Civil Organizada en el país han sufrido una disminución de sus fondos, ya sea de forma radical (27.3%), considerable (16%), estar en riesgo de operar (16.2%) o han visto una reducción en un 10 a 30% de sus ingresos totales (11.3%).
De acuerdo con la encuesta “Sociedad civil organizada frente al COVID-19. Impacto, retos y acciones de resiliencia” realizada por el grupo Causas Ciudadanas, del que forma parte la Fundación Merced Querétaro A.C., y el cual está integrado por 21 organizaciones, redes y colectivos de distintas entidades federativas del país, destaca que las organizaciones medianas son las que más afectadas se han visto (30.6%).
Por otro lado las organizaciones pequeñas son el grupo menos afectado en este rubro (21.3%), pero con el mismo porcentaje se evidencia el riesgo de dejar de operar (21.3%) frente a las organizaciones medianas o grandes.
Adicionalmente, las organizaciones pequeñas tienen el mayor porcentaje por el concepto ‘no aplica’ (25.5%).
El objetivo de Causas Ciudadanas es contribuir a mejorar el entorno en el que se desarrolla la sociedad civil organizada (SCO). Además, conocer de qué manera la contingencia sanitaria COVID-19 ha impactado en el quehacer de la sociedad civil organizada.
Los estados donde mayoritariamente trabajan SCO que contestaron la encuesta son: Sonora (62 organizaciones), Ciudad de México (60 organizaciones), Querétaro (48 organizaciones), Estado de México (38 organizaciones) y Tamaulipas (37 organizaciones).
Las temáticas principales que abordan las organizaciones participantes son: educación (13.5%), servicios asistenciales (9.5%), derechos humanos (9.3%), participación ciudadana (8.8%) y salud (8.6%). Las poblaciones objetivo con las que trabajan principalmente las organizaciones participantes son: adolescentes y jóvenes (12.8%), mujeres (12.2%), niñas y niños (10.5%).
El 75% de las organizaciones emplea de 0 a 20 trabajadores remunerados, el restante 25% emplea de 21 hasta 300 empleados.
El 75% de las organizaciones cuenta con el apoyo de 0 a 20 voluntarios y el 25% restante realiza sus actividades con la ayuda de 21 a mil 120 voluntarios.
Reorientan programas
Para atender a su población objetivo derivado de la contingencia sanitaria, las organizaciones reorientaron sus programas (39.5%) y crearon nuevos (24.4%) y un significativo 14.9%, suspendió actividades debido a la crisis sanitaria.
Otro dato relevante, fue que las organizaciones recortaron un 55.8% de voluntarios frente al 44.2% de empleados remunerados. El recorte de empleados remunerados fue más profundo en las organizaciones grandes (59.2%), aunque las organizaciones medianas experimentaron el recorte de voluntarios de manera más fuerte (55.7%).
6 de cada 10 organizaciones aseguran que los gobiernos locales no han tomado ninguna acción clara para ayudar o colaborar con SCO. Algunas organizaciones declaran que los gobiernos sólo han colaborado con organizaciones de corte asistencial y que trabajan directamente ante la emergencia del COVID-19.
La principal necesidad que identifican las SCO es la de recursos económicos para seguir operando e implementar sus proyectos (46.2%), pero también para destinarlo al pago de gastos fijos (renta, luz, agua, salarios, etc.).
El 19.7% consideró que los recursos económicos son indispensables para atender a la población objetivo.
El 14.5% de las organizaciones que participaron en la encuesta indicó la necesidad de contar con un fortalecimiento digital y dar continuidad a su trabajo.
Los recursos económicos también son necesarios para que las organizaciones, grupos o colectivos tengan acceso a equipos de cómputo e internet para sus colaboradores, así como el fortalecimiento de herramientas y plataformas digitales que les permitan llevar a cabo su trabajo.
De las 477 organizaciones que participaron en la encuesta únicamente 93 cuentan con un fondo patrimonial para mantenerse en operación durante la actual pandemia por COVID-19.
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