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¿Cómo responder ante una rabieta?

Foto: iStock
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Actuar correctamente ante una situación difícil mejora la comunicación entre padres e hijos Fátima Fajer Los niños son de lo mejor que te puede pasar; son divertidos, honestos, ocurrentes, inocentes y te recuerdan lo que es sentir una verdadera ilusión. Sin embargo, toda esta perspectiva puede cambiar cuando algo no resulta como lo desean y … Leer más

Actuar correctamente ante una situación difícil mejora la comunicación entre padres e hijos

Fátima Fajer

Los niños son de lo mejor que te puede pasar; son divertidos, honestos, ocurrentes, inocentes y te recuerdan lo que es sentir una verdadera ilusión. Sin embargo, toda esta perspectiva puede cambiar cuando algo no resulta como lo desean y se enfadan.

El motivo por el cual un niño se molesta puede provocarse por una infinidad de razones, desde no querer los vegetales para comer hasta no comprarles lo que piden en el momento que les place.

  • Dale su espacio

Cuando el niño comienza a hacer berrinche, hay que darle su espacio antes de regañarlo. Ellos tienen derecho a enfadarse y expresar sus emociones, pero en su corta edad es difícil externarlo de una manera objetiva.

  • Que no se sienta amenazado

Ponerse de rodillas frente a él, viéndolo a su nivel, lo hace sentir menos amenazado. Enfrentar a un niño a su altura es demostrarle que no es inferior y sus problemas no son menos importantes o relevantes.

Cada uno enfrenta sus propias batallas, y aunque para ti suene como algo simple o sin sentido, son el tipo de dificultades que los niños enfrentan en esa etapa de su vida.

  • Ejercicios de respiración

Los ejercicios de respiración son buenos para recuperar la paz. Posteriormente, cuando el niño esté más tranquilo, le pides hablar de lo que le molesta, y así proceden a encontrar juntos una solución.

Aunque cada niño tiene una personalidad distinta y reaccione a su manera, existe un patrón de comportamiento en las actitudes que toma, que se refleja en una pérdida de control y una conducta impulsiva.

Es común y frecuente que la desesperación se haga presente ante estas circunstancias; sin embargo, no hay que tomar la misma posición, ya que el adulto responsable debe conservar la calma.

Con información de: ‘Disciplina positiva’, Jane Nelsen; ‘Hábitos para niños’, Valeria Lozano.

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