Presentan denuncia contra chofer de transporte suburbano

Los agentes realizan operativos diarios en diferentes calles y avenidas de la ciudad, además de supervisar los paraderos del transporte público

Gonzalo Flores

El Municipio de Querétaro y una agente de Movilidad presentaron de forma conjunta una denuncia ante la Fiscalía General del Estado de Querétaro, en contra del conductor del transporte suburbano que fue detenido en Santa Rosa Jáuregui por policías municipales, luego de una persecución, provocada por no quererse detener para que la funcionaria pública pudiera descender del vehículo y acercarse al conductor, con la finalidad de hacerle recomendaciones por su forma de conducir en la parada de transporte de 5 de Febrero y el bulevar Bernardo Quintana, en la colonia San Pablo.

El secretario de Gobierno del municipio de Querétaro, Apolinar Casillas Gutiérrez, comentó que la denuncia se presenta por el probable delito de privación ilegal de la libertad y no por secuestro, como circuló por redes sociales. El hombre está detenido y la unidad retenida como parte del protocolo policial.

A las 07:30 horas de ayer, el chofer de transporte suburbano, quien se dirigía a San José Iturbide, Guanajuato, retuvo contra su voluntad a la agente de Movilidad, pues se molestó por las indicaciones recibidas; por ello, cerró sus puertas y arrancó su unidad sin hacer ninguna parada hasta su detención.

Casillas Gutiérrez explicó que la agente solicitó apoyo vía radio a elementos de la Policía Municipal, por lo que comenzó una persecución que finalizó en Santa Rosa Jáuregui, donde el hombre fue detenido.

Señaló que, cuando se presenta una circunstancia como esta, el protocolo de seguridad que deben seguir los agentes de Movilidad es solicitar apoyo a las bases de Seguridad Pública, por lo que descartó la posibilidad de otorgarles un arma de servicio.

Gerardo Ríos Quezada, director de Gestión para la Movilidad, señaló que es la primera vez que se presenta una situación de esta magnitud; sin embargo, de una a dos agresiones por semana reciben los agentes de Movilidad, como agresiones verbales o que les ‘avientan’ los vehículos.