Raúl D. Lorea
@ArqLorea
La semana pasada tuve el honor de ser juez en un concurso de diseño organizado por la Secretaría de la Juventud del Gobierno del Estado de Querétaro (SeJuve), donde se convocó a estudiantes de arquitectura y diseño industrial para desarrollar propuestas de un parque ubicado en la colonia “Los Héroes” en el Municipio de El Marqués.
Entre las Universidades que recuerdo, participaron el ITESM, la Anáhuac, la UAQ, ITN (antes ITQ), Cuauhtémoc y UVM. Ofrezco una disculpa por si olvidé alguna.
Se integraron 10 equipos, mismos que trabajaron bajo la dinámica de “repentina”, que es muy recurrente en nuestra formación como arquitectos, trabajando bajo presión con tiempo límite y con una jornada única de 24, 36 o hasta 48 horas.
Para ello, el Colegio de Arquitectos del Estado de Querétaro (CAEQ) fue el anfitrión, prestando sus instalaciones para desarrollar el proyecto, donde las y los estudiantes convivieron durante 24 horas para cumplir el objetivo.
Se entregaron las 10 propuestas, mismas que fueron evaluadas por personal de SEJUVE, de la CEI, de la SDUOP y del CAEQ. Llamó mi atención una condición que no había visto en otros concursos: revolvieron a todos los concursantes integrando equipos con estudiantes de diferentes universidades, es decir; todos trabajaron con desconocidos.
Felicito al equipo ganador y a la SEJUVE por esta edición del concurso, denominado “Diseñatón”, pues se logró una experiencia muy positiva para las y los estudiantes apoyando a la calidad de vida de una comunidad como “Los Héroes”.