Raúl D. Lorea
@ArqLorea
Querétaro es el 6° lugar en “estrés hídrico” en México, mientras que nuestro país ocupa el lugar número 24 del mundo, según el WRI (Instituto Mundial de Recursos, por sus siglas en inglés).
Recientemente me he topado con reglamentos de fraccionamientos donde no se permite la colocación de tinacos en las azoteas. Me sorprende mucho que eso les parezca pertinente y se fomente el gasto de energía de esa manera ya que los tinacos funcionan por gravedad (el agua baja sola) pero al no haberlos, se dependería completamente de una bomba, la cual a su vez dependerá del suministro de energía eléctrica.
Con la sorprendente recurrencia de apagones que hemos vivido durante este sexenio, la energía eléctrica no es la mejor opción para garantizar que una casa tenga flujo continuo de agua.
Ojalá recapaciten los responsables de fomentar estas prácticas en los nuevos fraccionamientos y, en lugar de prohibir los tinacos por razones estéticas, comiencen a promover un uso racional del agua, la separación y tratamiento de las aguas grises, así como el cuidado de las áreas verdes que tanta falta nos hacen, tanto públicas como en lo privado, pues la tendencia sigue siendo “forrar de concreto los patios de las casas”.
Urge que tomemos una conciencia diferente del cuidado y manejo del agua potable, queda poca en el mundo y en Querétaro ya no hay, por eso se construyen sistemas como el Acueducto III, que traerá agua de otro lado. Necesitamos unirnos ciudadanía y gobierno para tomar este tema y crear políticas públicas para el cuidado del agua.