Fernando Islas
Uno de los centros de la política queretana es la Universidad Autónoma de Querétaro, no sólo porque es un espacio de formación académica, sino porque es la misma alma máter, de la cual, gran parte de los representantes populares emanan. Por ello es entendible que los procesos internos de la UAQ sean de interés ciudadano.
En este semestre que está en curso se define quién estará al frente de la rectora, pero antes de esa elección, cada uno de los directores debe mostrar a través de diferentes procesos, como la elección de consejeros universitarios, que tienen el respaldo de su unidad académica, para posteriormente definir a qué proyecto se suman. Hoy en día se visualizan dos proyectos, el oficialista y el opositor, ambos aún no son oficiales, pero, desde diciembre pasado, los aspirantes se han dejado ver en comidas, reuniones grupales y en corto, y en más de una ocasión les han dicho sus intenciones a sus allegados .
En definitiva será un proceso electoral álgido y después del paro estudiantil queda claro que las alumnas y los alumnos serán quienes definan al siguiente titular de la rectoría. Esperemos atentos, pero no esperemos tanto, las elecciones están a la vuelta.
