El Gallo 12/Con espolones de gallo
Triste y lastimosamente Balanta (35) se hizo expulsar muy temprano, nada menos que al minuto 7 del primer tiempo. No podemos negar que desacomodó el cuadro, y para intentar hacer el ajuste, tenemos que agradecerle a Gerk (que no Guerk), que no sacara a un delantero, el sacrificado fue Hernández (14) por Barbieri (6), con esta decisión mandó un buen mensaje a la tribuna, “no vamos a bajar los brazos y vamos a seguir atacando”.
Sin embargo, a pesar de que el esfuerzo se notó en la cancha, no nos alcanzó para nada, honestamente nunca vimos un Puebla “mandón” ni dominante, es más, lo sentimos a “medio gas” o quizá es que así lo dejaron, después de la desarmada que le pusieron. ¿Qué queremos decir con esto? Pues que, no pensamos que aun con cuadro completo hubiéramos obtenido un mejor resultado, hoy se tiene el pretexto de la “expulsión temprana”, pero si hacemos un análisis más profundo del partido, ni el cuadro local se empleó a fondo ni nosotros generamos una gran cantidad de verdaderas oportunidades de gol. En el primer “pepinillo”, el delantero poblano le gana la espalda a Rivera (23) y Fernández (4) con lenta reacción no alcanza a llegar. Y en el segundo, se le adelantan a Fernández (4) y sobre su humanidad (mala noche para el canterano) conectan el cabezazo que terminó dentro del arco de Gil (1).
Así que, como ya lo temíamos, “bienvenidos a nuestra realidad”, lo habíamos manifestado, será un torneo perdido, con el inminente castigo de pagar la consabida multa que nos da la oportunidad de no descender. No nos queda más que seguir esperando “por alguien” que nos rescate de las manos de esta directiva que poco o nada les importa Querétaro, en todo lo que conlleva, incluyendo al equipo.
Sigue Atlas, coincidentemente, casi al año de los sangrientos sucesos del 5M, no tenemos gran expectativa de que nos regalen una alegría dentro de la cancha, pero la esperanza “queda al último”, según Pandora. Por lo pronto a seguir cargando dos farolitos, sólo un partido ganado en 19 fechas y sin ganar de visitante, 48… y contando.