Hoy, concluimos una página en nuestra vida con el cambio de un año más, terminamos el año 2022 y comenzaremos un nuevo año. Creo que es momento de volver hacia atrás y revisar cómo fue el año para cada uno de nosotros, pero no para quedarnos en el pasado, sino para que busquemos mejorar lo que ha pasado, busquemos un cambio en nuestras vidas y podamos caminar de manera adecuada hacia un futuro más próspero para nuestras vidas.
Este año 2022, seguimos con los efectos de la pandemia, misma que no ha desaparecido y que ha cambiado la formas de la COVID, sin embargo, la vida ha sido ya casi normal, creo que nos faltó más vacunación, nos falta ser más conscientes de la enfermedad y también creo que tenemos que seguir cuidándonos y seguir protegiendo a quienes más queremos. Nuestro mundo ya ha llorado mucho por quienes se nos han adelantado, nuestro recuerdo es para ellos y, por ese recuerdo, tenemos que seguir cuidando a quienes queremos.
Fue un año con cambios de climas, señal de que nuestro planeta debe tener cuidados y tener más pendiente de nuestro ecosistema y de la naturaleza que nos rodea. Una de las tareas para el próximo año 2023 es cuidar nuestro planeta.
No puedo dejar a un lado el mencionar algunos acontecimientos que marcaron este año: los hechos en el estadio ‘La Corregidora’, en donde vimos cómo un partido de futbol se convirtió en un hecho muy lamentable de violencia y agresión. La guerra en Ucrania ha marcado la historia de nuestro mundo, un hecho al que, a veces, no se le ha dado la importancia correspondiente; es indiscutible que debemos de buscar la paz mundial, dejar a un lado lo que nos separa y tender los puentes que nos llevan a la concordia.
La muerte de Pelé cierra este año 2022, uno de los más grandes deportistas del mundo nos deja semanas después de que se celebró el Mundial de futbol, mismo que nos puso a ver el deporte más popular en el planeta. La muerte de la reina Isabel II de Inglaterra fue otro de los acontecimientos que marcaron este año que finaliza y, ahora, el mundo está al pendiente de la salud del papa Benedicto XVI, quien se encuentra sumamente grave.
Así las cosas, entramos al nuevo año 2023, un año que definitivamente tiene que ser diferente; tenemos muchos retos enfrente, tenemos muchas situaciones que cambiar y que mejorar como sociedad, es necesario que tendamos puentes de solidaridad, de ayuda mutua, de concordia. No podemos propiciar divisiones y no podemos ser causantes de problemas sociales, tenemos que ser factor de soluciones. Tenemos que hacer de nuestras ciudades un mejor lugar para vivir y para que vivan nuestros hijos. Mañana, renace una nueva oportunidad, tenemos que aprovecharla. De corazón, deseo a los lectores de este gran periódico un venturoso año 2023, que, con la ayuda de Dios y nuestro esfuerzo, sea un mejor año para todos. ¡Muchas felicidades!