Iván Torres
Ubiquemos quiénes y cómo se van construyendo las figuras deportivas de nuestros tiempos. Por un lado, fue gratificante para quienes somos observadores de fondo de los deportes, ver el duelo entre Novak Djokovic y Rafael Nadal.
El tenista español sigue dando ejemplo de grandeza. Parece que su fortaleza mental le ha llevado a superar o soportar esa grave lesión de su pie. Vence, compite y gana superando al mejor del mundo. Impresiona. Tal como lo dijo otro grande del deporte, Tom Brady, “si se puede llegar a ser el primero alguna vez, por qué no seguirlo haciendo”.
Le va muy bien a Nadal, un hombre que desde hace un año está en las puertas del retiro, pero su mente cada vez tiene más claro que dejar el tenis no es una opción en el corto plazo. Además, sigue demostrando que no hay igual en la pista de arcilla. Su trayectoria desde su etapa juvenil fue demostrar talento, pagar derecho de piso; después, mostrar capacidad para vencer a cualquiera, dominar su deporte con inteligencia, rodearse de la gente adecuada para llevar su carrera, dentro y fuera la cancha, con un campo de acción notable y controlando su entorno para no despegar los pies de la tierra, incluso salir de su zona de confort.
Dicho lo anterior, quiero reconocer a la figura de Sergio ‘Checo’ Pérez, que va por ese camino. Hay que darle el crédito de sus logros. Lo que pasó en Mónaco no fue cualquier cosa; ha sido un triunfo de los más grandes que puede alcanzar un atleta o deportista en el mundo. ‘Checo’ ya pasó por pagar derecho de piso, incluso sacrificó salario por un lugar en la Fórmula 1; está alcanzando la cima con categoría, conocimiento y experiencia. Hoy está en el Real Madrid del automovilismo, el equipo Red Bull.
Lo que más satisface es cómo conquista cada logro. Aquí replico lo que Nadal ha hecho: “mostrar capacidad para vencer a cualquiera, dominar su deporte con inteligencia, rodearse de la gente adecuada para llevar su carrera, dentro y fuera la pista, con un campo de acción notable y controlando su entorno para no despegar los pies de la tierra, incluso salir de su zona de confort”.
Estamos ante un figura mundial y es orgullosamente mexicana.