Iván Torres/Rotaciones
Acabamos de pasar dos días de juegos emocionantes y de alarido en la Liga de Campeones de Europa con duelos que se definieron en los últimos minutos, con llegadas que pegaron en los postes, la sacó el portero. Con la tribuna volcada con sus respectivos equipos, cánticos, gritos, un ambiente extraordinario.
También en la semifinal de la “Concachampions” entre Pumas y Cruz Azul, el encuentro fue muy entretenido, con jugadas de estupenda ejecución, en fin, dan ganas de volver a sentarse a ver futbol.
Sin embargo, no todo es miel sobre hojuelas. Hay partidos realmente aburridos y ya se está haciendo una costumbre que en las etapas de calificación no hay esa misma intensidad. Lo atribuyo a que si bien se han modificado las reglas en el terreno de juego, creo que hay que buscar fórmulas en las puntuaciones para hacer que los equipos, entrenadores y jugadores, sean más creativos o imaginativos para ganar.
Sólo veamos el crecimiento que ha tenido la Fórmula 1 en los últimos cinco años. Cambió reglas, invirtió en tecnología y desarrollo, amplió su gama de circuitos más rápidos y retadores, apostó a los jóvenes pilotos, encontró estrategias de mercadotecnia ligadas a la globalización, un sin número de cambios profundos que hoy tiene vendidos el 90 por ciento de los boletos de toda la temporada en todo el mundo donde se celebrará una carrera, en los cinco continentes. En México, a excepción del un clásico, el futbol apenas vende 25 por cierto previamente y lo demás, es el día del partido.
He visto a directivos rezar en domingo para que el día de partido salga tablas y poder pagar la nómina del lunes. Creo que le falta un tema conceptual a los que llevan el futbol en algunos países, ejemplo México, para vender mejor un producto que no deja de ser noble y envidiado. Desde tratar de equilibrar fuerzas en los equipos, hasta cambiar reglas de puntuación, buscar mejores talentos o mejor detección de ellos, sigan experimentando algunos cambios en las reglas de la cancha, mejor capacitación arbitral.
El futbol se está rezagando con relación a otros espectáculos deportivos, se acaban la canasta de los huevos de oro, están en extinción.