Al final, el pueblo gana el derecho de ser escuchado
Fernando Islas
Desde el momento en que el INE daba a conocer el porcentaje de participación ciudadana en la reciente consulta para enjuiciar a los expresidentes, la oposición tomó una postura colérica ante este ejercicio democrático. No esperaron ni siquiera que finalizara la jornada, cuando ya se mofaban del bajo índice de participación; sin embargo, solo demostraron que, en complicidad con el instituto electoral, buscan a toda costa el poder desalentar y eventualmente coartar la posibilidad de que el pueblo sea tomado en cuenta.
Demostraron que la ciudadanía no les interesa, sugieren el olvido como única opción ante los atropellos, el insomnio y el garrote que las anteriores administraciones utilizaron como política de Estado. La realidad es que prácticamente 7 millones de personas acudimos a votar. Dicha votación fue mayoritariamente por el SÍ, lo que demuestra que la sociedad consciente está lista para participar de manera directa en la vida pública de México. Es curioso; la nueva oposición busca comparar a nuestro país con Occidente, sin tomar en cuenta que justo en esos países este tipo de ejercicios son parte elemental de su sistema democrático.
Al final, el pueblo gana el derecho de ser escuchado, después de décadas de ser históricamente ignorado. Los expresidentes ganan el mantener por una temporada más la impunidad que los mantiene lejos de la cárcel y los actuales opositores se regocijan en un ‘triunfo’ por la participación del pasado domingo, sin entender que ellos, sus familias y amistades también son pueblo, ese pueblo acribillado por la voracidad del neoliberalismo a la mexicana.
Sembramos una semilla y ha dado sus primeros frutos. Hoy nos queda seguir construyendo el camino para que todo aquel que traicione al pueblo no viva en la paradisiaca impunidad donde se encuentran aquellos que desmantelaron el país. Aunque no lo crean, el triunfo es nuestro.