Excell Erre
Ópera Rhagàntia
¿Cómo se definen y plasman años de preservación, esfuerzo y búsqueda en la intimidad de aquellas personas cuyo loable motor ha sido mantener vivo el arte?
Encontrar una respuesta a la pregunta anterior es bastante simple y se podría reducir al hogar del coleccionista, aquella persona apasionada e interesada por el arte, invirtiendo en él, adquiriendo obras, promocionando artistas y financiando espacios públicos o privados para su difusión, apreciación y consumo.
Claro, el arte y el diseño se conjugan con maestría, y lo hacen prodigiosamente al tratarse de los interiores de semejantes personalidades, quienes han perfeccionado su sentido de la belleza y estética a través de los años, adquiriendo un conocimiento que añade un valor único a sus hogares, involucrando y haciendo parte del propio diseño, al arte.
Desde gigantescas mansiones estilo mediterráneo repletas de crudos materiales al natural albergando corazones de LED de Tracey Emin adosados a la pared, pasando por los asépticos paraísos de blancura que comprenden los bastiones contemporáneos cuyos muros son devorados por abstractos geométricos, hasta las acogedoras residencias palaciegas de madera con grabados japoneses de Gabriel Orozco adornando sus rincones.
¿Se pueden imaginar la cantidad de estilos diferentes que podemos encontrar?
¡Tantos como artistas hay en el mundo!