En un mundo con tantas opiniones diferentes y una creciente infodemia gracias a las redes sociales, generalmente el camino más sensato para validar nuestras verdades es apoyarnos en la ciencia
Darinel Herrera
Cada día en nuestro mundo surgen nuevas necesidades, nuevas innovaciones, más tecnología, más comodidades, más productos en el mercado. Pero también cada día surgen nuevas preguntas.
¿Son estos nuevos productos benéficos para el ser humano y para el medio ambiente?¿Qué sustancias hay en nuestros alimentos, en nuestros campos, en nuestras medicinas?¿Son estas sustancias e ingredientes benéficos para la salud?
En un mundo con tantas opiniones diferentes y una creciente infodemia gracias a las redes sociales, generalmente el camino más sensato para validar nuestras verdades es apoyarnos en la ciencia.
¿Pero qué pasa cuando la ciencia está condicionada o sometida por los capitales? ¿Qué tan vulnerable y corrompible puede ser el método científico cuando se le sitúa como árbitro?¿Cómo podemos contrarrestar los ataques de ciertos grupos de interés (Políticos, empresas, corporativos) que buscan mantener una ignorancia deliberada?.
A esta serie de fenómenos destinados y orientados a corromper la ciencia se le conoce como Estudios de distracción. El arte de usar la ciencia en contra de la ciencia.
Pero, de qué se trata todo esto? ¿Cómo funciona?
Es simple, se trata de realizar investigaciones en torno a un problema detectado a fin de generar un número indeterminado de factores a investigar, que finalmente desvíen el foco de la investigación inicial a fin de deslindar responsabilidades y evadir acciones de responsabilidad por parte de los culpables.
Una práctica muy común en empresas de la industria refresquera, tabacalera y energética.
Tras años de vivir bajo las prácticas de los estudios de distracción. Nace la Agnotología.
Un nuevo campo de investigación dedicado al estudio de la ignorancia estratégica y la ausencia del conocimiento. En otras palabras, una nueva rama de las ciencias sociales dedicada a entender y todos aquellos factores y actores que obstaculizan la adquisición del conocimiento.
La ignorancia estratégica
La ignorancia estratégica es una ignorancia deliberada e intencionada que obstaculiza todo lo que consideramos no conveniente de informar. Es decir, una ignorancia capaz de reproducirse y gestionarse.
El objetivo: Detener el progreso de la ciencia para proteger los intereses particulares.
Bajo este contexto, la agnotología nos ayuda a entender cómo la ignorancia se fabrica y cómo podemos protegernos de ella.
Finalmente debemos entender que cada época representa también una nueva realidad. Y en la actualidad vivimos una época donde el mundo gira alrededor de la economía. Y es esta quien desafortunadamente decide qué investigaciones se aceptan y cuáles no.
Es decir, que vivimos una época donde hay un control de la economía sobre la ciencia. Una época donde nos encontramos con Investigadores con conflictos de intereses y científicos que dejan de ser éticos y objetivos porque están influenciados por la financiación de sus proyectos.
En la actualidad todos los laboratorios compiten como un ente meramente comercial y se mueven por tendencias como cualquier otra industria: Genómica, nanotecnología, inteligencia artificial.
Tristemente, la competencia comercial orienta a la ciencia en una dirección. Mientras tanto, ciertos campos científicos se quedan de lado por no ser lucrativos. La llamada ciencia por hacer.
Bastos territorios de ignorancia que preferimos no producir porque no generan dinero.
Fuente: Bulos y certezas. ¿Por qué dudamos de la ciencia? | DW Documental
https://www.youtube.com/watch?v=A4azhF5pZWU
