En pocas palabras y sin que esto sea suficiente, esta reforma brindará más derechos laboral y seguridad social a las y los trabajadores de México
Fernando Islas
La defensa de los derechos y conquistas laborales ha sido una de las principales causas para la movilización popular, no solo en México, sino en el mundo entero. En Querétaro el antecedente inmediato data del 2011 en donde el Sindicato Único de Profesores y Académicos de la Universidad Autónoma de Querétaro encabezó una fuerte defensa de la seguridad laboral, no solo de su gremio, sino de todos los sectores afectados por la Reforma Laboral impuesta por el gobierno de Felipe Calderón que nos situaba en un escenario de esclavitud moderna que legalizaba el pago de $7 la hora y dejaba sin porvenir a la juventud mexicana.
Esta inconformidad fue canalizada dentro del Proyecto Alternativo de Nación del compañero Presidente Andrés Manuel López Obrador, teniendo como principal objetivo blindar las diferentes conquistas laborales de clase trabajadora de nuestro país y al mismo tiempo regularizar el llamado ‘outsourcing’ o subcontratación. Hace unos días esta lucha a dado uno de sus primeros frutos, y es que en agosto del año en curso habrá una reforma en materia de subcontratación que generará un incremento de 100 mil millones de pesos en reparto de utilidades, entre un 15 y 32 por ciento de aumento salarial y al mismo tiempo más de 300 mil trabajadores y trabajadoras serán reconocidos y transferidos a la empresa para la que realmente laboran.
En pocas palabras y sin que esto sea suficiente, esta reforma brindará más derechos laboral y seguridad social a las y los trabajadores de México, este es un claro ejemplo que no se necesita tener un gobierno privatizador y entreguista para generar acuerdos claros entre el sector público, privado y laboral.