Como siempre las mayores esperanzas de recuperación se centran en el plan de rescate anunciados por nuestro vecino del norte que a través del T-MEC reactive la economía
Carlos Olguín
Muchos temas se han hablado acerca de la pandemia, el número de contagios, de muertos, las vacunas, el cierre de actividades, etc, pero los efectos apenas comienzan a verse y esta semana el INEGI hace algunas revelaciones.
Mexicanos primero con base en datos del INEGI muestra que 3 millones de estudiantes de pre escolar, primaria y secundaria han desertado de seguir con sus estudios, y un poco más de 2 millones de educación media superior y superior, con lo que se evidencia que algo así como el 10% de la matricula total de estudiantes han dejado de estudiar.
El programa aprende en casa ha dejado más dudas que soluciones, la falta de internet en muchas zonas del país, principalmente en las más pobres, que es donde más se requiere de la educación como el motor de cambio social han estancado, pues además del internet tener una computadora o un celular para poder usar las plataformas de educación los han dejado muy lejos de un mejor futuro.
Muchas de las escuelas públicas se han documentado que se han abandonado, están rapiñadas, con ventanas rotas, cayéndose, el día que volvamos a las aulas habrá que esperar en qué condiciones se encuentran.
Las políticas públicas de cerrar las aulas no guardan congruencia con el resto de las decisiones, pues se abren restaurantes, súper mercados, transporte público, etcétera y ahí es donde están los y las niñas con la misma exposición al virus que en un salón de clases que además muchos estudios como los de los CDC de USA han demostrado que las escuelas no son un foco de infección.
Los padres han tenido que soportar el desgaste de la relación con los y las hijos de tener que hacerse cargo de la educación muchas veces sin las herramientas necesarias ni la pedagogía necesaria para el proceso de enseñanza-aprendizaje.
Por otro lado, los datos del INEGI de acuerdo con el Estudio sobre la Demografía de los Negocios demuestran que, en 1 año de pandemia, micro, pequeñas y medianas empresas cerraron su cortina 1 millón en un año dejando efectos muy nocivos para la economía y difíciles de recuperarse.
Como siempre las mayores esperanzas de recuperación se centran en el plan de rescate anunciados por nuestro vecino del norte que a través del T-MEC reactive la economía, porque de este lado no hay nada nuevo.