La generación que podrían ser los nuevos candidatos de AMLO todos son mayores de 50 años
Roberto Mendoza
Entre 2009 y 2011 trabajé en un noticiario que en ese momento, tenía cierta importancia, nunca que yo sepa, hubo un amago de censura, el actual presidente era invitado, si no con regularidad, tampoco nunca se le negó ni el espacio, ni el micrófono.
En los momentos previos a entrar a una entrevista, sentados en la gran sala de espera, Andrés Manuel López Obrador me comentó que después de las elecciones de 2012, cualquiera que fuera el resultado, se retiraría y con preocupación me dijo que sentía mucho que no hubiera alguien realmente joven que pudiera tomar la estafeta que posiblemente dejaría.
Hoy todo parece indicar que el presidente sigue con esa preocupación, las cosas son diferentes, no hay gente nueva, pero si una generación un poquito más joven, aunque para el caso parezcan lo mismo, no son lo mismo, por ejemplo, Marcelo Ebrard no continuó con las grandes obras de AMLO cuando este dejó el gobierno de la ciudad, no trató de hacer obras monumentales, sino cambios que seguramente pensó, se sentirían más cercanos a la gente, por lo que no construyó un segundo piso en el viaducto, pero si varias líneas de Metro y Metrobús.
La generación que podrían ser los nuevos candidatos de AMLO todos son mayores de 50 años, los más nobeles, en su gobierno, no deciden casi nada, de hecho… nadie decide nada que no sea el presidente. Sí hay una gran lucha debajo de la mesa y eso lo hemos sabido porque algunas decisiones que ha tomado el presidente parecen forzadas por circunstancias creadas que, sin aceptarlo, escapan de su control y parecen ser consecuencia de luchas entre su equipo. Algunos ejemplos de esto es la crisis de las vacunas, otro la renuncia de la embajadora de Estados Unidos y más recientemente el resurgimiento de una supuesta acusación de trata de mujeres y prostitución contra un líder del PRI, para distraer sobre las marchas del 8 de marzo.
¿Vivimos una gerontocracia con toques de Teocracia? ¿En los próximos años nos van a gobernar unos viejitos que a través de buenos deseos, nos quieran imponer normas morales y no quieran entender conceptos como el feminismo o la despenalización del aborto? ¿Seremos un país donde nuevos conceptos y palabras sean desechados porque los líderes no las entienden y no las quieran entender? ¿Seguiremos con gobiernos que su base teórica y su principal pensamiento sea uno que se vivió hace mucho tiempo y que hoy francamente está rebasado? No es una anécdota, el gobierno quiere imponer una forma de vida, que caducó hace más de un siglo.
Desde hace más de 10 años al presidente le preocupan los jóvenes, pero no hace nada para abrirles camino y por lo que se ve, no se los abrirá. Sólo hay dos partidos que sí le han abierto la puerta a los jóvenes: uno es el PRI; a lo mejor usted me dice que es una simulación, que los jóvenes están atados a un liderazgo en ese partido, puede ser, pero no se puede negar que se les ha dado la oportunidad e incluso a muchos, nadie le ha regalado nada y han peleado con todo para sobresalir y ganar su lugar en el partido. Hay nombres que se van a volver importantes con el tiempo como Paul Ospital en Querétaro o Néstor Camacho en Aguascalientes. El otro partido es Movimiento Ciudadano, con Luis Donaldo Colosio a la cabeza o incluso Samuel García con todas sus aristas. El presidente, no tiene un plan para la generación de menos de 35 años, ni para las mujeres, ni para los niños, ni para los discapacitados, que no sea regalar dinero, una contradicción más de un gobierno de izquierda y que según, es para todos.