Las empresas unidas a esta iniciativa de Sostenibilidad de Frutas y Hortalizas (SIFAV) han lanzado su nueva estrategia de sostenibilidad colaborativa para 2025

Darinel Herrera

El pasado martes 9 de marzo, un evento en línea marcó el inicio del nuevo plan de acción colectivo alineado a los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la Organización de las Naciones Unidas, una estrategia conjunta entre los principales actores del sector agroalimentario europeo que busca acelerar la transición hacia un sistema alimentario justo, saludable y respetuoso con el medio ambiente para el 2025.

Una iniciativa creada y liderada por la organización IDH Sustainable Trade (una empresa social que trabaja con empresas, financiadores, gobiernos y la sociedad civil para realizar el comercio sostenible en las cadenas de valor globales).

Las empresas unidas a esta iniciativa de Sostenibilidad de Frutas y Hortalizas (SIFAV) han lanzado su nueva estrategia de sostenibilidad colaborativa para 2025. Las nuevas ambiciones se centran en reducir la huella ambiental en toda la cadena de suministro, la mejora de las condiciones laborales, los salarios y los ingresos, y el fortalecimiento de la transparencia y la presentación de informes de diligencia debida.

Con el objetivo claro de contribuir activamente a una cadena de suministro de frutas y hortalizas frescas más sostenible para el mercado europeo, los socios de SIFAV, entre ellos minoristas, marcas, comerciantes, organizaciones de la sociedad civil y otras partes de apoyo, han establecido ambiciones de sostenibilidad conjuntas y un plan de acción hacia 2025.

Los socios de SIFAV creen que la acción colaborativa es esencial para abordar con éxito los complejos riesgos y problemas que enfrentan en sus cadenas de suministro de frutas y hortalizas frescas compartidas. Al unir fuerzas, las empresas pueden lograr más que la suma de sus esfuerzos individuales.

El valor de esta asociación ha demostrado su eficacia durante los últimos 8 años. Como resultado del esfuerzo conjunto de los Socios de SIFAV, la adopción de verificación social de terceros se disparó de 0,7 millones de toneladas de importaciones de frutas y hortalizas frescas verificadas socialmente en 2013 a 3 millones de toneladas en 2019, provenientes de 60 países diferentes. Este apalancamiento se utilizará ahora para impulsar una agenda de sostenibilidad mucho más amplia y acelerar aún más el progreso.

“Junto con socios clave, tanto clientes como proveedores nos hemos embarcado en un viaje hacia estilos de vida más saludables y cadenas alimentarias más sostenibles”, dice Florens Slob, Director de Sostenibilidad del Grupo de Greenyard. “Solo al asociarnos en la cadena de valor podemos lograr nuestros objetivos de sostenibilidad en temas generales como el cambio climático o la administración del agua. Como hicimos con la sostenibilidad social en los últimos años, estamos convencidos de que nuestra cooperación dentro de SIFAV apoyará nuestro viaje e impulsará nuestros esfuerzos para ser una fuerza impulsora en la construcción de cadenas alimentarias sostenibles ”.

Bajo SIFAV, todos los socios del sector privado se comprometen con los siguientes objetivos de sostenibilidad hacia 2025:

Ambiental:

Trabajar junto con sus socios de la cadena de suministro para medir y reducir la huella ambiental de productos prioritarios para 2025, entre otros:

Reducción del 25% de la huella de carbono en tres productos prioritarios;
25% de reducción de la pérdida y el desperdicio de alimentos en tres productos prioritarios;
Reducción del uso de agua a niveles de mejores prácticas en 3 cuencas de captación seleccionadas conjuntamente; Implementación de estándares de agua (verificación de terceros) para el 70% del volumen de países con alto riesgo de agua.

Social:
Implementación de verificación social de terceros aprobada conjuntamente, hasta que al menos el 90% del volumen provenga de países de alto y medio riesgo para 2025.

Dar un primer paso para mejorar hacia salarios dignos o ingresos dignos, mediante el análisis de las brechas de salarios dignos e ingresos dignos en una de sus cadenas de suministro y, si es posible, también comprometiéndose a reducir estas brechas.

Debida diligencia:
Implementar políticas y procesos sólidos de diligencia debida en la cadena de suministro de derechos humanos y medio ambiente de acuerdo con las Directrices de la OCDE y de la ONU

Informar de forma conjunta e individual sobre riesgos y avances anualmente a partir de 2022.

Al establecer estos objetivos claros, SIFAV es un motor de acción. La alineación sectorial y transfronteriza aporta claridad y eficiencia, y las políticas, los enfoques y las herramientas de sostenibilidad desarrolladas conjuntamente equipan a los socios de SIFAV con apoyo práctico para trabajar hacia los objetivos. Los ejemplos son una herramienta de riesgo de sostenibilidad para comprender y priorizar los riesgos en una cartera diversa de frutas y verduras y un índice de huella ambiental para calcular la huella real de un producto.