Es muy complicado tratar de explicar lo obvio, en este espacio, ya habíamos señalado que nuestro plantel es de baja calidad técnica y muy corto, y desde hace cuatro partidos nos han dado la razón. Habíamos hecho del Corregidora una “fortaleza” y los teníamos como “localistas”, pero eso se acabó. Con Puebla y Guadalajara, “los puntos completos estaban en la bolsa” y nos sacaron cuatro en los últimos momentos, tal como quitarle “un dulce a un niño”.
Hoy no vamos a denotar errores (que los hay) en lo particular, sino en lo colectivo, las distracciones y las malas decisiones nos están costando caras y seguimos de “caída en un tobogán, empapados con grasa… ésta, cada vez más densa”.
Algunos opinan que se dio buen partido en Monterrey, y si vamos a ganas y actitud no les falta razón, pero ¿en realidad se hizo ese buen partido? No dejemos de lado que teníamos un hombre de más desde el 34’ y con ello, apenas “nivelamos las acciones”, al final… perdimos. Contra Guadalajara, llegó un momento que los “encapsulamos”, de poco valió, nuevamente, fallamos en la central, donde definitivamente no contamos con algún elemento de calidad en esa zona.
El fuego nuevamente nos está llegando a “los aparejos”, ya solamente estamos a cinco puntos de la quema para apoquinar unos buenos milloncitos en el lugar 16, con Juárez acechando, recordemos nos falta jugar contra ellos y que será un partido por seis puntos literales en la tabla de cocientes. La distancia es de 10 con San Luis, nuestro próximo rival, que si ahí perdemos o empatamos en casa… no quiero ni pensar las consecuencias. Y a 17 del Atlas, que significan seis partidos de “colchón” por siete por jugar, estas matemáticas nos colocan a un encuentro, de que ellos pierdan o ganemos nosotros para librarnos del “farol rojo”, pero no de desembolsar dinero que no tenemos y que cuentan “las malas lenguas” que lo quieren “invertir” en el futbol americano. ¡Cosas que uno no se explica!
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