“100 años de la Catedral de Querétaro.”
Este próximo día 1 de marzo se cumplen 100 años de que el antiguo Templo del Oratorio de San Felipe Neri de la ciudad de Santiago de Querétaro, fue electo como Catedral de la Diócesis de Querétaro con el nombre de Santa Iglesia Catedral del Apóstol Santiago, tal y como se lee en el decreto de traslación de la iglesia Catedral que fue firmado en Roma en esa fecha pero en el año de 1921, toda vez que se había solicitado a la Santa Sede esa autorización al encontrarse la sede catedralicia en el antiguo Templo de la Congregación de Clérigos Seculares de Santa María de Guadalupe desde el año de 1911.
Fue el Papa Benedicto XV, quien autorizó el mencionado cambio, mediante decreto de la Congregación Consistorial, quien atendiendo la solicitud del quinto obispo de Querétaro, Mons. Francisco Banegas y Galván, toda vez que la sede en donde se encontraba había sido asaltada por las fuerzas revolucionarias a la vez que no era el espacio más idóneo para realizar las funciones catedralicias por lo que estando en abandono por parte de los Padres del Oratorio su antiguo templo se solicitó esta autorización.
Es de mencionar, que desde que fue la erección de la Diócesis de Querétaro en 1864 por el Papa Pío IX, nunca se tuvo un templo construido para Catedral de la nueva Diócesis y fue designada como iglesia para hacer la funciones de Catedral el antiguo Templo de los Jesuitas que fue posteriormente convertida en Parroquia de Santiago Apóstol, tal y como ahora se encuentra en la actualidad, sin embargo posteriormente se la sede fue cambiada al Templo de San Francisco, en donde permaneció hasta el año de 1911, de ahí se trasladó al Templo de la Congregación de Clérigos Seculares de Santa María de Guadalupe, posteriormente al Templo de San Felipe Neri y con intervalos en el Templo de San Antonio de Padua. Sin embargo la autorización de la Sede Papal desde hace 100 años es para el templo donde ahora permanece.
El templo fue concluido en el año de 1805, siendo uno de los lugares con mayor magnificencia de la ciudad; toda la obra fue debida al cuidado, celo y actividad del Reverendo Padre Dimas Diez de Lara que era Prepósito del Oratorio y fue el Padre Miguel Hidalgo y Costilla quien bendijo el oratorio el día 19 de septiembre del año mencionado, y estuvo dedicado a los Siete Dolores de María Santísima.
La ahora catedral ha sido adaptada en diversos momentos de la historia, hasta quedar como lo conocemos el día de hoy, destacando la presencia de la bella imagen del apóstol Santiago como titular del mismo y santo patrono de la ciudad. En las criptas del mencionado templo se encuentran los restos de los obispos que ha tenido la Diócesis de Querétaro y de grandes sacerdotes que han estado en esta Diócesis. A 100 años de distancia recordamos este acontecimiento de gran importancia para los queretanos.
Lic. Francisco Pájaro Anaya.
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