Monseñor Florencio, el Padre Florencio, como muchos lo conocimos, convivió con muchas familias queretanas por años y nunca negó su queretanidad a pesar de haber estado en otros lugares de la república mexicana y del extranjero ejercitando su ministerio
Francisco Pájaro Anaya
Twitter: @fcopajaro
El pasado día 20 de diciembre de 2020 falleció en la ciudad de Tequisquiapan, Querétaro, S.E.R. Monseñor Florencio Overa Ochoa, quien era obispo emérito de la Diócesis de Cuernavaca y que antes había sido obispo de la Diócesis de Tabasco. Hablar de Monseñor Florencio es hablar de gran parte de la historia de la iglesia católica en Querétaro, sobretodo en algunas décadas del siglo XX. Monseñor Florencio, el Padre Florencio, como muchos lo conocimos, convivió con muchas familias queretanas por años y nunca negó su queretanidad a pesar de haber estado en otros lugares de la república mexicana y del extranjero ejercitando su ministerio.
Nació en Tequisquiapan, Querétaro el día 12 de octubre de 1933, hijo de Don Andrés Olvera Vázquez y Doña María Ochoa Ramírez, estudió la Primaria en Tequisquiapan, Qro.; la Escuela Apostólica en 1947, Humanidades del año de 1948 a 1952, y la Filosofía 1952 a 1955 en el Seminario Conciliar de la Diócesis de Querétaro; la Teología 1955 a 1959 en la Universidad Gregoriana de Roma.
El día 26 de octubre de 1958 es Ordenado Sacerdote en Roma. Para el año de 1959 colaboró como profesor en el Seminario Mayor de Querétaro y Vicario Cooperador en la Parroquia de la Divina Pastora. Fue Prefecto del Seminario Menor de 1960 a1963; Prefecto del Seminario Mayor de 1964 a 1965; Vicario en la Parroquia de San Juan del Río de 1965 a 1967; y desde 1967 Maestro del Seminario Mayor; Director Espiritual del mismo seminario de 1967-1970.
En el año de 1971 fue nombrado Vicerrector con funciones de Rector del Seminario de Querétaro, siendo su décimo primer Rector. Fue presidente de OSMEX (Organización de Seminarios de México), en y en 1980 es nombrado Rector del Pontificio Colegio Mexicano en Roma, a él le toco organizar los festejos en Roma de los 450 años de las apariciones de la Virgen de Guadalupe.
En 1983 a su regreso a México es nombrado Vicario Episcopal de Pastoral y posteriormente en 1984 es nombrado Vicario General de la Diócesis de Querétaro. Encabeza el proyecto de reanimación pastoral de 1988 a 1989; prácticamente llevó el caminar de la Diócesis de Querétaro después de la renuncia del señor Obispo Don Alfonso Toriz Cobián que estuvo gravemente enfermo.
Miembro del Consejo Presbiteral y del Colegio de Consultores. Capellán del Hospital Civil de Querétaro y de diferentes comunidades religiosas, encabezó los festejos de los 125 años de la erección de la Diócesis de Querétaro y la recepción del nuevo Obispo Don Mario De Gasperín, quien lo ratifica como como Vicario General de la Diócesis.
El Papa Juan Pablo II lo preconizó XI Obispo de Tabasco el 19 de octubre de 1992. Tomo posesión de su Diócesis el 30 de noviembre de 1992. Después de un poco más de nueve años, el 21 de marzo de 2002 tomó posesión como obispo de la Diócesis de Cuernavaca en el estado de Morelos. El 10 de julio de 2009 S.S. Benedicto XVI acepta su renuncia como Obispo Titular de la Diócesis de Cuernavaca al cumplir 75 años de edad.
Fue llamado a la Casa de nuestro Padre Dios el día 20 de diciembre de 2020, siendo sepultado en el bautisterio de su amada parroquia de Santa María de la Asunción en la ciudad de Tequisquiapan, Querétaro. Descanse en paz, Monseñor Florencio Olvera Ochoa.