Colombia cierra el año con 100 masacres o muertes selectivas, como los llama el Gobierno
Pedro León Jáuregui
Después de dos largos meses estoy intentando ordenar mis ideas frente al computador para escribir de manera ordenada, lo que deseo comunicar
No voy a escribir de lo cerca que he tenido o tengo la despedida de este mundo, no pienso en ello. Arrastro los pies y me despierto en la noche para ir al baño con las luces apagadas, para tratar de vencer los miedos de un golpe, pero es la única forma de ganar confianza y no pensar que Dios me tiene que hacer todo.
Pero, lo único cierto es que el 2020 será un año inolvidable para el mundo y Colombia, especialmente.
Colombia cierra el año con 100 masacres o muertes selectivas, como los llama el Gobierno. Entre los últimos asesinados estuvo el de un niño de cinco semanas. Es decir más masacres que semanas.
Pero eso no es todo desde la firma del acuerdo de paz en 2016 en Cuba hasta hoy donde han sido asesinados más de 1000 líderes Sociales y Personas Defensoras de los DDHH, fundamentals para la democracia”, algo que suena para Ripley, por lo doloroso, pero que es muy cierto.
La crisis social y desintegración familiar que vive el país se observa con más tristeza en el archipiélago de San Andrés y las islas de Providencia y Santa Catalina que fueron asoladas por el huracán Iota hace 45 días y no obstante las promesas del Gobierno por un pronto inicio de trabajos, la situación sigue igual o peor.
El archipiélago y las islas están habitadas por gentes de un grupo étnico caracterizado por su gran habilidad como navegantes de mar, los que han sido escogido como objetivo de los grupos delincuenciales para enlistar a sus jóvenes a fin de usarlos en sus propósitos ilegales.
Pero eso no es de extrañar sí nos atenemos a lo que se vive con Gramalote, un pueblo del Norte de Santander, de 3.500 habitantes, al que el 17 de diciembre de 2010, se lo tragó la tierra debido a una falla geológica y aún no ha sido reconstruido no obstante la millonaria inversión que el Gobierno invirtió.
Por todo esto el 2020 es un año para nunca olvidar, especialmente en la Frontera con Venezuela.