Cuando llegó a Gallos había tenido un mal paso por Chivas, sin embargo, Nacho era en México, hasta antes de la incorporación del Vasco Aguirre a Monterrey (hace unos días), el entrenador más experimentado en el futbol europeo
Ivan Torres
Me honra decir que Nacho Ambriz, técnico campeón del futbol mexicano, varias veces me dedicó su tiempo para platicar de futbol y muchos otros temas personales que me confió cuando trabajamos juntos desde 2013 a finales de 2014. Él, siendo entrenador de Gallos, y un servidor, como director de prensa en el conjunto queretano. A principios de 2014, vivimos una de las peores crisis económica y administrativa del equipo, sino es que la peor. No abundaré en el tema pero rescataré varias cosas que hoy me permiten hacer el análisis de lo que se conforma como un caso de éxito, de un individuo exitoso al que le aprendí, tuve la fortuna de seguir de cerca su trabajo y entendí mucho de sus circunstancias.
Cuando llegó a Gallos había tenido un mal paso por Chivas, sin embargo, Nacho era en México, hasta antes de la incorporación del Vasco Aguirre a Monterrey (hace unos días), el entrenador más experimentado en el futbol europeo. Trabajó seis años junto al Vasco y eso le dio todo el conocimiento que al día de hoy le ha rendido los frutos merecidos. Yo creo que ya debería tener un par de títulos de liga más, pero hasta este fin de semana pasado pudieron coincidir los planetas para tener en sus manos su primer trofeo de liga.
Les daré un dato al que siempre se refiere Nacho cuando habla de futbol, “yo les inculco a mis jugadores la intensidad, así es en el futbol mundial, en Europa”, y para lograr eso, hay un trabajo multidisciplinario enorme, pasando por la convicción del jugador, la condición física y mucho más. Recuerdo que los rivales no podían con la intensidad ejercida por el equipo de Nacho, tendrían que correr más y “sudar sangre” para poder ganarle; era una premisa.
Priorizar el esfuerzo del grupo pero más importante contar con la solidaridad del equipo, había que tener a los 23 jugadores a punto. En el futbol no solo son 11, es toda una institución detrás del éxito. Sus números más recientes en León, 1 campeonato, 2 lideratos, 3 finales, récord de puntos en fase regular, récord de triunfos consecutivos, 4 torneos seguidos entre los primeros dos lugares, varias veces mejor defensiva y mejor ofensiva. Sus números en el pasado son: 6 liguillas, dos con Querétaro, dos con América, tres con León. Perseverancia en el trabajo es la clave del ahora técnico campeón del futbol mexicano.