Hay un sinfín de temas para reflexionar, puede ser una estrategia de campaña por parte de Trump, pero también las relaciones diplomáticas se dejan muy lastimadas, lo cierto es que para acabar con la corrupción solo hace falta cruzar la frontera al parecer
Carlos Olguín/Columnista
La transición a la democracia de los países en que se han visto envueltas las fuerzas armadas nunca ha sido tersa, pero siempre se van delimitando las funciones que pueden y no pueden hacer, en México por ejemplo no pueden contender por puestos de elección popular desde 1917, sin embargo con el paso del tiempo se les fue involucrando en temas políticos, como represión a huelgas, sindicatos, hasta Tlatelolco 68, donde se dio un parteaguas en la historia mexicana para separar al ejercito de funciones políticas.
Con Ernesto Zedillo el general de división Jesús Gutiérrez Rebollo, comisionado del Instituto Nacional para el Combate a las Drogas (INCD), protegía al principal narcotraficante mexicano Amado Carrillo Fuentes, apodado El Señor de los Cielos y jefe del Cártel de Juárez, causó gran conmoción en México y enrareció las relaciones con Estados Unidos.
Posteriormente Vicente Fox, siguió con la estrategia de militarización del país, pero con Felipe Calderón la estrategia fue la seguridad integral en manos de los militares, táctica que siguió Peña y en la 4T se potenció aún más, de acuerdo con el analista Alejandro Hope el 90% de los elementos de la guardia nacional son militares, el mando es militar, la distribución de medicamentos, los grandes contratistas del sexenio, el aeropuerto, el tren maya, los bancos del bienestar, refinerías, etc, etc, se hacen cargo de puertos y aduanas, cuidado de hospitales, distribución de medicamentos, se les ha puesto el país en las manos por su “honestidad”, que ahora se derrumba.
En USA tenemos un ex secretario de seguridad ciudadana, preso por vínculos con el narco, lo mismo que un ex secretario de la defensa nacional, que nos hacen preguntarnos, ¿En quién podemos confiar?, que tipo de país vivimos, en un narco-estado al parecer.
Lo que deja muy mal parada a la 4t, pues de inmediato se dijo que habría una limpia en la Secretaria de la Defensa, pero lo que no midieron es que los más altos mandos de la actual administración son parte del grupo que rodeo a Cienfuegos.
Hay un sinfín de temas para reflexionar, puede ser una estrategia de campaña por parte de Trump, pero también las relaciones diplomáticas se dejan muy lastimadas, lo cierto es que para acabar con la corrupción solo hace falta cruzar la frontera al parecer, porque aquí no había ni investigación al respecto, tendremos que estar pendientes del desenlace de esta terrible historia.