Ante la grave situación económica y sanitaria que atravesamos, los senadores del PAN hemos insistido desde marzo en la aprobación de una Ley de Emergencia y Recuperación Económica
María Guadalupe Murguía Gutiérrez/Columnista
Un grupo plural de senadores presentamos una solicitud de consulta popular para preguntarle a la ciudadanía si está de acuerdo en que se apoye económicamente a los trabajadores formales e informales que han perdido su trabajo o visto afectada su fuente de ingresos con motivo de la pandemia del COVID-19.
La pandemia ha causado fuertes estragos en la economía del país, aunque también es importante reconocer que la crisis venía produciéndose con anterioridad al virus. Como resultado de la emergencia sanitaria más de 1 millón 976 mil personas quedaron desempleadas en el primer trimestre del año y según datos de INEGI durante la pandemia 12.6 millones de personas perdieron su trabajo o sus fuentes de ingresos.
Ante la grave situación económica y sanitaria que atravesamos, los senadores del PAN hemos insistido desde marzo en la aprobación de una Ley de Emergencia y Recuperación Económica que prevé fundamentalmente otorgar una ayuda temporal de $3,207 pesos mensuales para hacer frente a la crisis, así como apoyos de $27,500 pesos durante 3 meses para las MiPymes, a fin de evitar la pérdida de más empleos y apoyarlas en su reactivación.
En la coyuntura que se presenta, 43 senadoras y senadores de diversos grupos parlamentarios estamos convencidos en promover la participación ciudadana a través de una consulta popular que -de acuerdo con la Constitución- requerirá la aprobación de ambas cámaras del Congreso para llegar a la Suprema Corte, la cual resolverá sobre la constitucionalidad de la materia de la consulta.
Han sido reiteradas las propuestas, tanto de grupos parlamentarios como de expertos, sociedad civil y organismos internacionales, de brindar alternativas de apoyo económico a los mexicanos durante la contingencia, llámese Ingreso Básico Universal, Renta Básica, Ingreso Básico Temporal o Seguro de Desempleo, pero todas coinciden en el mismo propósito.
Sin embargo, en el Poder Legislativo no han sido discutidas, mucho menos aprobadas o consideradas por el Ejecutivo Federal; la negativa es recurrente a pesar de que un ingreso vital significaría oxígeno puro para mitigar la lastimada economía de las familias.
La consulta popular como instrumento de la democracia participativa debe ser una herramienta que permita consultar a la ciudadanía de manera directa sobre los temas realmente importantes y urgentes y que redunden en su beneficio. No cabe duda que el Ingreso Básico Universal de emergencia es uno de ellos.