La misión es clara para la actual administración federal encabezada por el único partido movimiento que ha triunfado en la historia democrática de México
Mauricio Ruiz
En este 210 aniversario de nuestra independencia es de vital importancia el reconocer el momento histórico que en la actualidad vivimos como país y como parte de Latinoamérica, zona que vive momentos de revolución y resistencia en diversos países hermanos. Entender que así como México, en el siglo XIX, sirvió en su momento de inspiración a otros pueblos que se encontraban bajo el yugo colonizador de los la corona española, hoy somos el país que marca el camino a seguir en cuanto al proceso democratizador que el pueblo latinoamericano exige desde varios ayeres.
Por ello el gran papel que ha desarrollado el compañero Presidente Andrés Manuel López Obrador y su gabinete al frente del país es la piedra angular de un proyecto alternativo de nación que fue creado y defendido desde las bases por las y los militantes, la ciudadanía participativa, intelectuales y académicos que decidieron ser protagonistas en el cambio de régimen y en especial por una generación de jóvenes que decidió abandonar el estigma de condena que le perseguía y en el vendaval de un movimiento nacional e internacional, acaparó espacios claves para la transformación de un país que tienen un pueblo que espera con urgencia que se le paguen las deudas históricas de justicia y libertad que se encuentran pendientes en la larga lista de ignominias que hemos sufrido a lo largo de la historia.
La misión es clara para la actual administración federal encabezada por el único partido movimiento que ha triunfado en la historia democrática de México, seguir manteniendo el trabajo de la mano del pueblo como principal eje rector de su vida orgánica, siempre con extrema cercanía a las causas justas y de redignificación de las clases más precarizadas y en especial mantener la fuerte apuesta al desarrollo de sus jóvenes como motor de un cambio transformador que promete un esperanzador futuro para un país que está acostumbrado a sacar la casta día con día, sin temor alguno y con el orgullo de ser mexicano por delante.
¡Viva México! ¡Viva los héroes y heroínas que nos dieron patria! Y en especial viva el pueblo que jamás baja los brazos y que de manera colectiva construyen un futuro para todos y todas.