El médico es un individuo libre, responsable, ético y un profesional que no debe ser minimizado a un recurso de la voluntad del paciente
Dr. Enrique Negrete/Columnista. Director del Hospital Santa Rosa de Viterbo
En la entrega pasada continuamos hablando acerca de la relación entre el médico y el paciente. En este sentido, cuando el paciente esté imposibilitado de expresarse, por su edad o la pérdida de sus facultades mentales, es necesario que un familiar o responsable legal que conozca al paciente informe los datos clínicos necesarios para el proceso de atención médica.
Bioética del Médico
El médico es un individuo libre, responsable, ético y un profesional que no debe ser minimizado a un recurso de la voluntad del paciente.
El médico tiene la libertad de negarse a realizar lo que en su conocimiento, conciencia y ética resulte dañino para su paciente, y estos principios no deben quebrantarse bajo ninguna circunstancia.
Bajo ninguna circunstancia los médicos fomentarán relaciones de índole no profesional con sus pacientes dentro de la Institución.
Es una responsabilidad y compromiso del médico mantenerse actualizado en su ámbito de competencia profesional.
Cuando el médico lo considere conveniente, deberán de analizarse el proceso de atención médica a través de reuniones multidisciplinarias.
El médico debe aplicar con criterio y responsabilidad y fundamentado en el diagnóstico clínico los métodos auxiliares de diagnóstico y tratamiento, fundamentándose en una evaluación clínica integral del paciente, explicándole su utilidad. De ser posible se debe evitar solicitar estudios repetitivos e innecesarios.
El médico debe fomentar la participación activa del paciente y su familia en el cuidado de su salud, estableciendo un compromiso mutuo.
El médico debe dirigirse al paciente por su nombre, evitando aplicar diminutivos aparentemente afectuosos, ante la posibilidad de parecer peyorativos.
La exploración clínica del paciente se realizará en un ámbito de respeto y profesionalismo y siempre cuidando la integridad y dignidad del paciente.
El paciente debe estar informado por su médico tratante de la evolución de su enfermedad y del tratamiento que está recibiendo y su pronóstico.