Algo frenó esa decisión de la Apertura 2020 y es que necesitan el argumento consensuado con los especialistas de la salud para decidir
Iván Torres
El futbol de la liga mx está por definir su futuro. Parecía que el pasado martes habían concretado el fin del torneo y transportaban su necesidad de arrancar el mismo hasta finales de agosto para darle paso al Apertura 2020.
Algo frenó esa decisión y es que necesitan el argumento consensuado con los especialistas de la salud para decidir.
Lo malo es que ni los expertos quieren o pueden dar certidumbre y la muestra está en las cifras oficiales fallidas, a mitad de marzo dijeron que el regreso sería el 20 de abril, después que el pico pandémico serían el 6 de mayo, ahora pronostican un regreso el 15 de junio cuando confirmaban el 18 de mayo como un oasis de tiempo que ni los municipios de la esperanza compraron para volver a la normalidad.
Lo malo es que aún no paran los contagios y aún no hay garantías de que al menos esto se detenga, sobretodo en partes del país donde se actuó tarde (no es el caso de Querétaro).
Dicen que los más avanzados en el tema y que han generado una propuesta para el reinicio del Clausura 2020 es el equipo de Chivas, quien ha presentado un documento o plan muy parecido al que permitió el inicio al futbol alemán.
Se distingue porque se sugiere que los partidos se hagan en Guadalajara y en ciudades con foco verde de contagios, comenzar en junio y terminar el 23 de agosto, incluyendo liguilla.
Jugar a puerta cerrada hasta antes de la fase final, en fin, algo que podría considerarse pero la verdad es que para muchos equipos, y por su posición geográfica, no han pasado ni lo peor de la pandemia, caso concreto Pumas, América y Cruz Azul están en el territorio más rojo del país, alcaldías Tlalpan, Coyoacán y Xochimilco.
El riesgo va a seguir si no hay una vacuna o algo similar que lo detenga. Yo creo que hoy, la desesperación por activarse económicamente en cualquier rubro, es lo que los orilla a decisiones aventuradas.
Tengamos sensatez y veamos por la salud de quienes pagan un boleto. Por cierto, la presión también viene de las televisoras, que si bien a ellos no les importa que se juegue a puerta cerrada, de alguna manera necesitan recuperar el pago que ya hicieron por los derechos de televisión. Estaremos pendientes.