Esta es la tercera entrega sobre adicciones, quedamos en que serían seis cuando hace un mes explicábamos la naturaleza misma de la adicción
José Luis Oliva
Sábado nuevamente momento de “detener el mundo” y posar nuestras mentes en estas líneas, dispuestos a reflexionar sobre la consciencia productiva, esta se compone de dos aspectos: la intención y la atención. La primera es la dirección, la misión, lo que quiero hacer. La segunda es la acción, la energía que me mantiene atento a no desviar el camino hacía la misión. Entre más claro tenga lo que quiero y entre más concentrado este en lograrlo, seré más productivo, lograrlo es la pasión que nos une cada sábado aquí.
Esta es la tercera entrega sobre adicciones, quedamos en que serían seis cuando hace un mes explicábamos la naturaleza misma de la adicción. En esta ocasión tocaba a la adicción a la tecnología en general, pero parece más útil hablar de la adicción número uno hoy día, la que se propaga como virus: la adicción a WhatsApp.
- Los números. 1 de cada 8 humanos usa esta aplicación, un usuario promedio manda 100 mensajes, 15 fotos y 4 videos al día y consulta sus mensajes cada 40 minutos.
- La Autoreferencia. El 65% de los mensajes que se envían son información sobre uno mismo, selfies, comida, chistes, situaciones. Este pensamiento autoreferente es en sí mismo adictivo (ver entrega anterior de esta tu columna).
- La plaga. El 15% de los usuarios (WhatsApp Zombies) no pueden controlar el uso de la aplicación, pasan mucho más tiempo del que desean, pero no pueden detenerse, es lo primero que hacen al levantarse y lo último que hacen antes de dormir. El 100% de los usuarios han enviado un mensaje del que se arrepienten.
- Remedio 1. Entra a la aplicación con un propósito y una vez que lo hagas salte. Cuando mucho entra una vez al día sin propósito y no más de 30 minutos, a “chatear” con grupos y amigos.
- Remedio 2. Para “chatear” NO utilices solo WhatsApp, utiliza para el trabajo una aplicación (telegram), para temas familiares otra (Threema) y otra para socializar (WhatApp). O como quieras, pero usa diferentes para diferentes propósitos.
- Educa a tu mente para que no te cause ansiedad que una “palomitas” este en verde y que un grupo tenga muchos mensajes sin leer. Cambia tu ritmo mental, no tienes que interactuar siempre de inmediato.