El Instituto de Misioneras Marianas, es una institución femenina que nace en la ciudad de Santiago de Querétaro
Francisco Pájaro
El Instituto de Misioneras Marianas, es una institución femenina que nace en la ciudad de Santiago de Querétaro, Querétaro, el 17 de febrero de 1920, como respuesta a las necesidades apremiantes que, a causa de la Revolución Mexicana, el país y nuestro estado estaban viviendo.
Fueron fundadores del instituto el padre Luis Martín Hernández y la señorita Clemencia Borja Taboada, quien se convirtió en la primera superiora de la institución.
La Congregación va caminando entre luces y sombras, pero siempre al servicio de los más pobres, pues es el carisma que legaron los fundadores: “La configuración con Cristo Evangelizador de los pobres” esto se logra en el servicio a los pobres a través de las obras de misericordia corporales y espirituales, en la educación, en el servicio de salud, en el servicio asistencial y en la evangelización misionera, con la finalidad de liberar al hombre del pecado, haciéndolo agente de su propia transformación personal y social mediante la acción misionera; liberándolos de la ignorancia mediante la educación y, liberándolos del sinsentido del dolor, mediante el ejercicio del servicio de salud, dando así sentido a la propia existencia.
Desde su fundación hasta nuestros días, se han fundado 69 comunidades locales, en los Estados de: Baja California, San Luis Potosí, Hidalgo. Chihuahua, Veracruz, Puebla, Edo. De México, Nuevo León, Tabasco, Guanajuato, Michoacán, Ciudad de México y Querétaro. En el extranjero se encuentran en países como: Chad (África), República Dominicana y Perú (Latinoamérica).
Las Misioneras Marianas llegan a esta ciudad de San Juan del Río en el año de 1949 y comienzan su labor de asistencia como enfermeras en el antiguo Hospital Civil de la ciudad, que en ese entonces se ubicaba en el Exconvento de San Juan de Dios, en donde se encargan de la atención sanitaria de los enfermos de manera profesional.
Para el año de 1957, por invitación del padre Francisco Paulín Gómez, llegan las Misioneras Marianas para hacerse cargo del antiguo Colegio Guadalupano, que había sido dejado por las religiosas de María Inmaculada de Guadalupe; ellas aceptaron el reto y dan inicio en ese año con el Colegio Corregidora, colegio de gran prestigio en el centro de la ciudad y que durante 62 años se ha consolidado como un baluarte de la educación sanjuanense.