¿Por qué será que llega un determinado tiempo en que las relaciones interpersonales se tornan de manera diferente?
Laura Casados
Acaso nos hemos preguntado ¿qué estamos haciendo o dejando de hacer para que esta situación empeore cada día más? y que cada vez las relaciones sean menos estables y su periodo de duración sea mucho menor; las cosas no pasan solo por casualidad; pasan debido a que uno contribuye en ello.
Como lo dice el dicho: Para que haya un problema, se necesitan dos. En cuestión de la discapacidad y el amor, se torna un poco más complicado y eso lo comprendí hace aproximadamente siete años, pues me explicaron que se trata de selección natural, la cual tiene que ver con el físico y con diversos factores que la conforman, y que siempre se elegirá aquello que sea mejor para cada uno de nosotros.
En una relación no se trata solamente de esperar a ver que me dan o que me merezco, sino de todo lo que le puedes ofrecer a la persona, ya que de esa manera en lo único en lo que se torna es en enfrascarnos en todos sus errores y dejar a un lado sus aciertos.
El amor no solo se trata de encontrar a tu príncipe azul o a tu princesa del cuento de hadas que siempre la sociedad se ha encargado de enseñarnos, sino que el primer amor que deberíamos tener al 100 es el de nosotros mismos, porque hay que recordar que no podemos dar aquello de lo que carecemos y el segundo debería de ser a nuestros padres y abuelos, ya que ellos serán los que siempre estarán ahí.
Las parejas pueden ir y venir, pero la familia siempre permanecerá. Recuerdo que, hace unos ayeres, mi abuela me compartía poemas que ella misma escribió durante muchos años, dependiendo de las vivencias que iba teniendo, y uno de ellos hablaba precisamente del amor…. y decía algo así, “Amar, qué palabra tan sublime y maravillosa, pero no amar a los placeres, sino a la vida, darlo todo sin esperar nada a cambio. Para ella, eso era amar.
No sabemos quién permanecerá a nuestro lado o quién estará cuando más lo necesitemos, pero lo que sí tenemos garantizado es que siempre nos tendremos a nosotros mismos y eso nada ni nadie lo podrá evitar, así que se tiene de dos, o nos disfrutamos o nos sufrimos, pero es elección de cada uno.