Es innegable que el ser humano es aspiracional, evolutivo y se propone objetivos ambiciosos, creo que por eso aun continuamos en el planeta
Liz Durán
A pesar de nuestras diferencias, desigualdades y terribles enfrentamientos, la mayoría tenemos en mente un mundo mejor, algo utópico que para muchos en el caminar diario, pensamos que poco se avanza.
Pero no se angustie, por eso somos humanos, porque podemos ver más allá de las decepciones, y debemos esforzarnos cada día más, donde ningún esfuerzo será pequeño.
Haciendo una comparación positiva, creo que así se sintieron en 2015 varios países donde se reunieron, firmando y adoptando una agenda a nivel mundial para el desarrollo sostenible y así combatir el cambio climático, o por lo menos –hoy me doy cuenta– para estar alerta ante posibles escenarios.
Agenda 2030 busca combatir desigualdades –aclarando que no es lo mismo que pobreza– para ese año. Promueve la prosperidad con 169 metas ambiciosas, resumidas en 17 objetivos llamados ODS (Objetivos de Desarrollo Sostenible) intentando mejorar el mundo, y si no por lo menos caminar juntos, anhelando un mundo más equilibrado.
Los objetivos hablan de erradicar la pobreza, hambre, desigualdad, alcanzar salud, educación, igualdad, agua limpia, saneamiento, energía, trabajo decente, innovación, ciudades sostenibles, consumo responsable, además de motivar a tener acciones para el clima, cuidar la vida submarina, los ecosistemas terrestres, paz e instituciones sólidas, así como las alianzas para lograr todo lo anterior.
Si, usted quiere un mejor entorno, municipio, o estado, pero no ve camino o avance desde su puesto, comience por leer los ODS, ubique ¿En qué tema puede impactar? ¿En qué tiene habilidades, cercanía?
Puede iniciar desde su casa, o empresa, promoviendo el objetivo ‘Producción y consumo responsable ODS12; inclusive si gobierna un Estado, catalogue las decisiones a partir de estos objetivos y emprenda un cambio eficiente, definiendo metas concretas ya sean económicas, políticas o sociales, pero de manera sostenible.
Aún hay tiempo, aunque escuchemos fuerte el tic, tac.