Laura Casados

Es sumamente frustrante ver que la vida suele ser complicada, pero que la gente sea la que te la complique más, es lo que de verdad baja la moral.

Les comento que ayer iba llegando a la central de autobuses, por cierto me sentía demasiado cansada y venía de un viaje de toda la madrugada, por lo tanto, lo único que quería era encontrar un taxi lo más pronto posible y llegar a mi casa a descansar finalmente, pero no fue así. No contaba con la parte de que los taxistas se negaran a subirme.

Para esto, yo venía en un ‘scooter’ eléctrico debido a que se me dificulta estar caminando en distancias largas, y  el cuál se puede desarmar en cuatro partes diferentes para que quepa fácilmente en cualquier coche, pero al momento de verme, los taxistas decidieron no subirme y no fue solamente uno, sino que fueron más de 10 taxis que me negaron el servicio, siendo que previamente se les había informado que sí era posible meterlo dentro del vehículo con todo y el equipaje, pero simplemente dijeron que no, que no querían subir nada a sus asientos y que no lo harían, así que así duramos alrededor de una hora hasta que alguien más pasó por nosotros.

El punto aquí, no es tanto mi caso, porque finalmente pude conseguir a alguien más que me apoyara, sino que, ¿qué pasa en realidad con las personas que se encuentran en una silla de ruedas permanentemente sin poder moverse por su cuenta y sin contar con el apoyo de alguien más para ir por ellos? ¿Cómo le tendrían que hacer o  hasta cuándo tendría que estar esperando  para poder acceder a un servicio que tiene por derecho?

Para algunos, tal vez no se signifique mucho, pero para otros puede ser un motivo de preferir quedarse encerrados en su casa sin querer superarse o hacer más por ellos y que aparentemente se pudiera pensar que la sociedad es nuestro peor enemigo por no brindar espacios ni las oportunidades necesarias, pero realmente el peor enemigo es la ignorancia y la falta de consciencia que si como dice Nelson Mandela, “Si quieres hacer la paz con tu enemigo tienes que trabajar con él. Entonces se convierte en tu mejor compañero”, el mundo sería completamente diferente y mucho más amigable para todos.