Querida lectora, es increíble nuestra especie, cualquier ciudad tiene muchos lugares que visitar, muchas historias que contar. Son como seres vivos que crecen y permanecen con su identidad, entre más edad más interesantes. Se podría pensar que la ciudad que ahora visitamos mentalmente tiene solo equipos deportivos famosos, pero hay mucho detrás de ella. Una charla con una querida lectora conocedora del arte moderno, inició este desfile literario sabatino. Anímate a provocar una experiencia haciendo llegar a esta columna tu historia, ya verás que grato.
Ubicada en Pennsylvania, es una de las primeras ciudades industriales del mundo que después transitó con éxito para transformarse en una ciudad de tecnología. En la actualidad alberga a mil 600 firmas tecnológicas y más de 60 universidades.
- Mi gemela y yo somos ‘fans’ de Andy Warhol desde adolescentes. Finalmente pudimos ir a su museo en la ciudad en que nació. ¡Es genial! 7 pisos y un sótano lleno de experiencias. Galerías, zonas interactivas, una réplica de su taller, la colección más grande de sus obras. Me encantó, aquí hay una demostración de la grandeza de Andy, no es solo el que hizo un cuadro de una lata de Campbell. Además, con este viaje, mi novio que es de Filadelfia dejo de ser virtual.
- ‘Apps’ turísticas. Hay más de 15 aplicaciones para recorrer Pittsburgh, cuando mi novio me invitó a pasar el verano con él, mientras el hacía un curso en Carnegie Mellon, pensé que iba a ser aburrido, pero ‘Guau’ que divertidas aplicaciones, recorres la ciudad con diferentes aventuras.
- El cielo de las bicicletas. Soy tan feminista como ciclista y vaya que soy muy comprometida con la causa. Mi mandíbula cayó en el momento en que entramos en este lugar. valió la pena la visita. ¡Se siente como que aquí es donde acaban todas las bicicletas que se han hecho! Podrías pasar horas en este lugar y aun así no verlo todo. Bicicletas verdaderamente clásicas, especiales, raras y muy raras. Está repleto, pero no desorganizado. Caminos claros para recorrer todo el museo y un personal amable. Es gratis, pero aceptan donaciones y realmente quieres dejar una donación después de la increíble experiencia.