La Ley de Ingresos 2019 propuesta por el Gobierno de AMLO, y secundada por la abrumadora mayoría de Morena en las Cámaras Legislativas, eliminó la compensación universal de impuestos.
Vamos por partes. ¿Qué era la compensación? La compensación es una manera de extinguir obligaciones cuando dos personas reúnen la calidad de deudores y acreedores recíprocamente. En otras palabras, debo dinero, pero me deben; por lo tanto, disminuimos deudas mutuas.
En materia fiscal sucede (sucedía) lo mismo. En términos generales, la mecánica consistía en aplicar saldos que generaban una devolución de dinero contra los adeudos de otro impuesto. Por ejemplo, el SAT me debe dinero de IVA, pero a la vez le debo ISR. Compensamos. Extinguimos.
¿A partir de 2019? Bueno, si tengo un saldo a favor de IVA, tendré que lidiar con un procedimiento lento y engorroso solicitando la devolución del dinero. El SAT para corroborar que la devolución es procedente solicitará información adicional y revisará la información. Tal vez después de ocho meses, veré mi dinero de vuelta. Tal vez, a pelear ante Tribunales. Lo mismo cada mes.
La compensación universal fue eliminada por el abuso de facturas falsas. En muchos casos, la compraventa de facturas se utiliza para solicitar devoluciones ilegales de dinero. En otros, igualmente ilícitos, se utilizan las facturas falsas para disminuir –vía compensación–, el pago de otros impuestos.
Sin embargo, muchas empresas utilizan la compensación universal por necesidad. Esa liquidez, que en muchos casos no hay, tendrá que pagarse para que el SAT lo devuelva después.
Desafortunadamente, por parte de la autoridad, lo mismo de siempre: más jineteo del flujo de efectivo y más castigo al contribuyente cautivo que se levanta diario a trabajar por México.
En los próximos días, serán publicadas las reglas para el caso de la compensación universal. Cualquier actualización al respecto, no dude en contactarme a través de redes sociales o vía correo electrónico, en [email protected].
Le deseo un 2019 con mucho trabajo y salud. ¡Felicidades!