Concluyendo el sexenio del general Cárdenas, México estaba en una posición complicada; el ambiente internacional era delicado. La sucesión presidencial no fue tan sencilla como en otras ocasiones.
Al final, la inclinación fue por el general Manuel Ávila Camacho, por su carácter conservador y conciliador. Pero la estabilidad que gozábamos encontró un quiebre cuando participamos en la Segunda Guerra Mundial; entramos el 23 de mayo de 1942.
La causa tuvo su origen en la destrucción de dos buques petroleros nacionales, situados en el Golfo de México, por parte de los países del Eje, ambos conocidos como ‘Faja de Oro’ y ‘Portero del Llano’. Fuimos aliados, entonces, de Estados Unidos, y una vez más demostrábamos la política del buen vecino.
Sin embargo, para fines jurídicos, ¿qué implicaciones tuvo esta época? A raíz de la ruptura ideológica entre naciones, México decidió privilegiar el orden; el 30 de octubre de 1941 se hicieron unas reformas a los artículos 129 y 145 del entonces Código Penal federal; se tipificaba como delito la “disolución social”.
Esta conducta prevista por el Estado partía de la desconfianza y por la intuición de que se planearía desestabilizar al país. Víctima de la disolución social, resultó el famoso muralista David Alfaro Siqueiros, quien fue encarcelado en la temible cárcel de Lecumberri.
Después de una estancia, que no fue muy placentera, a finales del sexenio de Adolfo López Mateos, el artista recibió el indulto presidencial por una presión mediática insostenible.
Pero, así como este ícono social, ¿cuántas personas fueron juzgadas por este delito, que era determinado por la simple sospecha de la autoridad? Esta falta de racionalidad continuó aplicándose con Gustavo Díaz Ordaz. El Estado había montado su propio poder inquisitivo y muchas veces esta facultad era manejada para fines políticos.
Una conducta reprobable a criterio de los gobernantes encontraba su disfraz perfecto y a la medida en un cargo por disolución social. La peor advertencia era la siguiente: “Has traicionado a tu amigo, el presidente de la República”.
