Así como dice el titulo de mi colaboración, escuche el día de ayer la voz de varias personas que, sorprendidas, ven cómo pasa este año y ya estamos a tres meses de que concluya. La verdad, ¡qué rápido se va el tiempo!, y en este año creo que para muchos el desarrollo de las actividades diarias ha hecho o parece que hace que el reloj corra más rápido que de costumbre.

Precisamente, comenzando este mes y su servidor y un grupo de personas, estamos ya organizando los festejos guadalupanos en el Templo del Sacromonte, donde como cada año, y desde hace más de 100 años, se festeja a la Guadalupana por parte de la diputación ahí establecida.

Pero este año constituye toda una serie de acontecimientos que prácticamente han llamado la atención permanentemente en la sociedad, desde hechos a nivel mundial, como las elecciones de los Estados Unidos, en donde veremos el desenlace el próximo mes de noviembre, hasta las situaciones de violencia de nuestro país, que desafortunadamente han causado muchas víctimas y situaciones de inestabilidad permanente.

En otras circunstancias, nos encontramos con buenas noticias para nuestra ciudad, como fue la publicación de dos libros que han ilustrado sobre la historia de San Juan del Río; pero, sobretodo, nos han hecho recapacitar sobre lo que tenemos y el valor histórico de una ciudad que está a punto de cumplir sus primeros 500 años de existencia.

Por cierto, el día de ayer se cumplió el primer aniversario en que el gobernador Francisco Domínguez tomó posesión de la titularidad del Poder Ejecutivo del estado de Querétaro, y creo que es tiempo de una pequeña evaluación sobre el trabajo realizado, pero también una evaluación sobre la participación social del los queretanos en la búsqueda de un mejor estado para todos.

A veces pensamos que solamente los gobernantes tienen que trabajar para lograr un mejor bienestar, pero se nos olvida que el trabajo es en conjunto, es decir: sociedad y gobierno, para tener mejores resultados. Ese es mi pensamiento, sin embargo, en esta sociedad democrática, todo pensamiento es válido.

Así son las cosas; creo que nos debemos de preparar para este último espacio del tiempo que le resta al año, son pocos meses y, sobretodo, es necesario ir haciendo planes para el siguiente año y continuar con la vida de cada uno de nosotros.

En lo personal, existe un reto muy importante, que es dar a conocer cada día más el Centro Histórico de San Juan del Río; es necesario hacer esta acción y sobretodo buscar que al darlo a conocer también se conserve de una manera digna.

Así mismo, el año entrante, nuestro estado será punto de referencia en el mes de febrero, por la celebración del Centenario de la Constitución de 1917, misma que fue promulgada en la ciudad capital del Estado. Esperemos que haya grandes eventos y que se haga partícipe a todos los queretanos de este acontecimiento que, sin duda, marcó la vida de Querétaro.

Yo esperaría, aunque es un sueño, que ojalá y como pasó hace 50 años, las constituciones originales de la República, vuelvan a San Juan del Río y puedan ser veneradas por los sanjuanenses; tal y como sucedió el 4 de febrero de 1967. Es un sueño, lo quise compartir y ojalá alguno de los lectores de mi colaboración cumpla ese sueño.