Esta noticia da gusto platicarla, son cambios que realiza el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) que le van a beneficiar a miles de mamás y también al propio Instituto, se los platico.

El primero de ellos, en mi opinión el más relevante, es la posibilidad de que las madres puedan elegir tomar menos días de incapacidad previo al nacimiento de su hijo para transferirlos para después del embarazo.

Anteriormente las madres podían gozar de 42 días de incapacidad (6 semanas) previos al embarazo y otros 42 después del mismo, no se podían transferir. En mi experiencia, prácticamente el 100% de las madres querían trabajar lo más que pudieran previo a su embarazo para poder permanecer con sus recién nacidos el mayor tiempo posible, algunas lograban acordarlo “por fuera” con sus patrones, muchas otras no. El acuerdo “por fuera” representaba riesgos para ambas partes.

El IMSS reconoce esta problemática y ahora permite que hasta 4 de las 6 semanas de incapacidad pre-parto se puedan transferir al periodo post-parto, esto es, las mamás pueden elegir trabajar hasta 14 días antes del parto y dejar 70 días de su incapacidad para después del nacimiento, me parece una excelente noticia.

Además, bajo el esquema anterior, los 42 días previos al parto se podían ver disminuidos si el nacimiento se adelantaba, esto es, si al día 35 de la incapacidad nacía él bebé, los 7 días restantes se perdían. Con la posibilidad de que hoy se puedan transferir semanas para después del parto, si el IMSS ya expidió el certificado de incapacidad, aun adelantándose el nacimiento, el periodo se respeta, eso sí, el certificado de incapacidad se tuvo que haber emitido previo al nacimiento del bebé.

El otro cambio consiste en facilitarle a la madre la obtención de su certificado de incapacidad, especialmente a las mamás que deciden atender su parto con un médico externo.

Anteriormente, aun cuando la mamá sabía que no se atendería en el IMSS, para efectos de obtener su certificado de incapacidad, indispensable para que su patrón tuviera justificada su ausencia y el Instituto le pagara dicha incapacidad, tenía que acudir a citas con personal del IMSS en 6/7 ocasiones, ahora tendrá que acudir una sola vez durante la semana 34 de su embarazo. Lo anterior no sólo le simplifica la vida a la mamá sino también le ayuda al Instituto pues les libera a sus doctores miles de citas que podrán ser destinadas a mejores fines.

La medida me parece sumamente lógica pues estas mamás (las que se atienden con un médico externo) suelen acudir al IMSS únicamente para cumplir con una formalidad y el hecho de que ahora asistan sólo una vez tampoco le presenta al Instituto un riesgo de “engaño”, un embarazo resulta imposible de fingir.

Les recomiendo visitar la página del IMSS (www.imss.gob.mx) para mayor información.

Por: Francisco Javier Ceballos Alba 

Hasta la próxima.