A través de productos veganos sensibilizan consumo de alimentos
El mercado saludable ha registrado un desarrollo importante, por las elecciones de lo que se come diariamente, de acuerdo con la empresaria Tanya Oseguera Francisco Roblero Los cambios culturales han sido parte de la lógica funcional en los grupos en cualquier sociedad y momento histórico que pueda mencionarse. El sector alimenticio no está exento de las … Leer más
El mercado saludable ha registrado un desarrollo importante, por las elecciones de lo que se come diariamente, de acuerdo con la empresaria Tanya Oseguera
Francisco Roblero
Los cambios culturales han sido parte de la lógica funcional en los grupos en cualquier sociedad y momento histórico que pueda mencionarse. El sector alimenticio no está exento de las modificaciones en lo que se aprende y desaprende a través del tiempo.
Actualmente es notable un crecimiento de consumidores vegetarianos y veganos y, por tanto, un fortalecimiento en la identidad y presencia de estos grupos en espacios de activismo, comercio y consumo.
Este es el testimonio de Eduardo Benjamín Ocadiz Quintanar y Tanya Sofía Oseguera Rodríguez, dos empresarios y partidarios de la comida saludable.
Benji es el nombre de su empresa con aproximadamente 15 años de haber ‘salido a la luz’, a partir de las necesidades personales de Benjamín, vegetariano de nacimiento, por acceder a productos acordes a su alimentación.
Hace cuatro años, Tanya se unió al proyecto y comenzó un crecimiento en la identidad y presencia de su empresa. Cuentan con el apoyo del Municipio de Querétaro: un subsidio para registrar su marca y asistir a exposiciones como la Expo Encuentro Industrial y Comercial Querétaro, también apoyos para la Asociación Nacional de Tiendas de Autoservicio y Departamentales y la Semana del Emprendedor.
Además del soporte municipal, cuentan con un fondo de inversión extranjero que se encarga, según comenta Benjamín, de invertir únicamente en empresas veganas latinoamericanas.
Con el apoyo recibido, el año pasado compraron maquinaria, lo cual les ayudó a aumentar la capacidad de entrada cinco veces, pues de un año a la fecha se han incrementado sus ventas considerablemente. Esto les ha abierto la posibilidad de entrar a cadenas de supermercados y otros estados de la República. Por el lado de la cultura vegana, Tanya comenta:
“El mercado saludable ha crecido mucho, porque cada vez nos importa más qué es lo que comemos y sabemos cuáles son los efectos de las elecciones que hacemos, aunque sean pequeñas, no solo en nuestro cuerpo, sino también en el entorno. Por eso, tenemos estas tendencias y políticas de no bolsas de plástico, no popotes”.
Para quienes tienen la inquietud por acceder a la cultura vegana, Benjamín y Tanya invitan a cualquier persona con alimentación indistinta a probar sus productos, e incluso, considerarlos parte de su dieta familiar con el acompañamiento de un nutriólogo. También promueven la desmitificación de las nociones de lo vegano como algo “caro” o “inaccesible”.
“Queremos concientizar a la gente de que no es caro, y también la parte de qué tan cara es tu salud que prefieres consumir algo que no te está nutriendo y a la larga vas a tener un perjuicio a tu salud”.
Sobre sus intenciones de cambiar las impresiones colectivas sobre el mercado vegano, Benjamín y Tanya mencionan que “entre más se normalice, se vuelva común, para la gente será más accesible. Nos acostumbramos a consumir lo que se nos anuncia, vitaminas A, B, C, y muchas veces no sabes de qué se trata, pero lo consumimos porque nos suena bien, familiar; se trata de que podamos elegir dentro un abanico de opciones y alternativas”.
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