Anúnciate aquí

Cinco conclusiones del informe de la ONU sobre los peligros climáticos

Cinco conclusiones del informe de la ONU sobre los peligros climáticos
Cinco conclusiones del informe de la ONU sobre los peligros climáticos

El informe aprobado por 195 gobiernos de la ONU muestra cuán generalizados y graves son los peligros climáticos

Raymond Zhong

Un grupo de expertos convocado por las Naciones Unidas ha presentado su análisis más completo hasta la fecha sobre cómo el cambio climático está afectando nuestros hogares, salud, medios de vida e infraestructura, así como los sistemas naturales de los que todos ellos dependen.

El panorama no es nada alentador. El informe, que fue aprobado por 195 gobiernos, muestra cuán generalizados y graves se están volviendo en todo el mundo los efectos del calentamiento global causado por el hombre, y cuán difícil será para las sociedades y los ecosistemas lidiar con esto si las naciones no reducen de manera drástica las emisiones de gases de efecto invernadero.

“Cualquier retraso adicional en la acción global anticipada y concertada hará que nos perdamos un momento fugaz de oportunidad para garantizar un futuro habitable y sostenible para todos”, dice el informe.

A continuación, los hallazgos principales del informe:

LOS PELIGROS CLIMÁTICOS HAN EMPEORADO SIGNIFICATIVAMENTE EN LA ÚLTIMA DÉCADA

El grupo de expertos, llamado Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC, por su sigla en inglés), publicó su último gran informe sobre los efectos del cambio climático en 2014 (el año pasado publicó un artículo separado sobre los impulsores físicos del cambio climático). En aquel entonces, el informe aseguró que había “evidencia limitada” de que las naciones necesitaban más dinero del que se les estaba asignando para lidiar con los peligros. El calentamiento global estaba teniendo un efecto “relativamente pequeño” en la salud humana en comparación con otros factores estresantes, dijo el informe del IPCC.

OCHO AÑOS DESPUÉS, LA HISTORIA DE LOS LOS PELIGROS CLIMÁTICOS ES OTRA.

El nuevo informe revela que el cambio climático no solo está contribuyendo con amenazas ecológicas como los incendios forestales, las olas de calor y el aumento del nivel del mar, sino que también está desplazando a las personas de sus hogares y poniendo en peligro el suministro de alimentos y agua. Está perjudicando la salud física y mental de las personas: hay una incidencia cada vez mayor de enfermedades transmitidas por el agua y los alimentos, dificultades respiratorias por el humo de los incendios forestales y traumas por los desastres naturales. Además, el déficit de financiación para abordar todos estos problemas está “creciendo”, según el nuevo informe.

SI NO SE FRENA EL CALENTAMIENTO, LOS PELIGROS SE MULTIPLICARÁN

Hasta hace relativamente poco tiempo, los científicos pensaban que el planeta podría evitar los efectos más dañinos del cambio climático si el calentamiento global no aumentaba más de 2 grados Celsius en comparación con las temperaturas del siglo XIX.

Ahora está claro que muchos de esos daños aparecerán si el calentamiento supera los 1,5 grados Celsius, como es probable que lo haga en las próximas décadas estamos en aproximadamente 1,1 grados Celsius en la actualidad). E incluso si sobrepasamos los 1,5 grados Celsius pero logramos que las temperaturas vuelvan a bajar después, aun podrían producirse daños graves e irreversibles, asegura el nuevo informe.

Si superamos los 1,5 grados Celsius de calentamiento, las regiones costeras, montañosas y árticas podrían sufrir de manera irreparable, dice el informe. Mayores incendios forestales, la muerte masiva de árboles, la sequía de pantanos y el deshielo del permafrost podrían liberar más dióxido de carbono al aire, lo que dificultaría todavía más detener el calentamiento global.

Si las temperaturas continúan aumentando más allá de ese punto, todos estos peligros se intensificarán y el daño económico global aumentará “de forma no lineal”, según el informe. Es muy probable que muchas más especies animales corran peligro de extinción. Los mosquitos expandirían su alcance hacia el norte, poniendo a miles de millones de personas adicionales en riesgo de contraer dengue para finales de siglo, dice el informe.

LAS SOCIEDADES NO HAN HECHO LO SUFICIENTE PARA ADAPTARSE Y MANTENERSE SEGURAS

El informe reconoce cierto éxito en la adaptación a estos nuevos peligros, como por ejemplo la implementación de mejores sistemas de alerta temprana para desastres. Sin embargo, en su mayoría, los esfuerzos de la humanidad han sido “fragmentados” y “poco significativos”, dice, y a veces hasta contraproducentes.

Las sociedades han construido diques para defenderse contra las mareas crecientes, pero por lo general eso traslada los riesgos de inundación hacia otras zonas costeras. Han trabajado para apagar incendios forestales, pero algunos de esos incendios tienen beneficios ecológicos.

El informe afirma que se requieren de cambios “transformadores” para proteger el bienestar humano, como sistemas de salud y saneamientos más sólidos, cadenas de suministro de alimentos que sean más robustas, redes eléctricas más resistentes y una planificación urbana con mayor visión de futuro.

MIENTRAS MÁS AUMENTE EL CALENTAMIENTO, MÁS DIFÍCIL SERÁ HACERLE FRENTE

A medida que aumentan las temperaturas globales, algunos ecosistemas como los arrecifes de coral, los humedales, las selvas tropicales y las regiones polares se están topando con los límites de su capacidad de adaptación, dice el informe.

Para algunas naciones, los costos de mantener la salud, la seguridad y el bienestar de las personas ya son exorbitantes, según el informe. Y a medida que el calentamiento siga incrementándose, las medidas que son efectivas hoy para la protección de los suministros de agua, el impulso a la agricultura y la defensa contra los daños relacionados con el clima perderán su eficacia. Por ejemplo, se pueden desarrollar variedades nuevas de cultivos para resistir el calor y la sequía, pero solo hasta cierto punto.

El informe sugiere que las comunidades intenten trabajar con la naturaleza en lugar de en su contra —como por ejemplo reviviendo humedales para defenderse de inundaciones catastróficas o aumentando la cantidad de árboles en las ciudades para refrescarlas— aunque incluso esto solo es efectivo hasta cierto punto.

LOS PAÍSES POBRES ENFRENTAN DESAFÍOS MUCHO MAYORES QUE LOS RICOS

Los países en desarrollo no solo tienen menos recursos para abordar las crisis climáticas, sino que además son más vulnerables. Su infraestructura suele ser insuficiente, sus redes de seguridad social son más débiles, y los medios de subsistencia de sus poblaciones dependen más del mundo natural. Entre 2010 y 2020, las inundaciones, sequías y tormentas mataron hasta 15 veces más personas en los países en desarrollo en África, Asia y otros lugares que en los países más ricos, según el informe.

Incluso dentro de los países ricos, existen enormes disparidades en cuanto a la exposición a estos riesgos entre diferentes grupos de personas. El informe asegura que en total, de 3300 a 3600 millones de personas —casi la mitad de la humanidad— son “altamente vulnerables” al cambio climático en la actualidad.

MT

Anúnciate aquí

Anúnciate aquí

Anúnciate aquí

Más noticias


Contenido Patrocinado